viernes, 31 de diciembre de 2010

De villancico y candela

Te regalo cucharadas de sabores,
mermeladas para decorar tu casa,
unos cuadros donde vivan muchos duendes,
noches buenas cada vez que el sol se vaya.
Te regalo una alfombra con poderes,
tres chequeras sin límite de abrazos,
una alcoba con ventanas a la vida,
una huerta donde nazcan los orgasmos.
Te regalo las semillas de las flores,
tierra fértil para cada paso,
un aljibe donde bebas tus anhelos,
toboganes que se lleven la nostalgia.
Te regalo un espejo que te enseñe
a mostrar el alma al semejante,
diccionarios de palabras que no duelan,
amuletos de perdón para actos malos.
Te regalo un árbol navideño
donde cuelgues tu fortuna y la compartas,
una mesa sin límites de asientos
para repartir el amor en rebanadas.


GABRIELA ABEAL

martes, 28 de diciembre de 2010

No me pidas la vida

No me pidas la vida. Sólo puedo ofrecerte
los ojos ciegos de una libélula disecada,
un libro sin concluir repleto de obsesiones,
un refugio con un solo cuarto de baño
y salón con vistas a la esperanza.

Sólo puedo ofrecerte
una caja de música herencia de un abuelo,
un reloj con insomnio,
un sueño social defraudado y sepulto,
el billete de un tren que nunca partió,
un estante colmado con jarrones de vidrio
cada uno albergando
el cadáver de un sueño.

Puedo ofrecerte
un páncreas propenso a la tristeza,
la cartilla de racionamiento de la felicidad,
un D.N.I. con la foto de un muerto,
el esqueleto roto de mi infancia,
la hora de la tarde
cuando abren los dondiegos.

Sólo puedo ofrecerte
un candil tirano
de miserable soledad entre las pitas.

No me pidas la vida.

Juan José Vélez Otero

miércoles, 22 de diciembre de 2010

El espantapájaros

Le amaneció
sentado en la misma piedra,
mirando
al mismo horizonte,
con el mismo rocío
mojándole la tristeza.

El mismo frío
en la piel de los huesos,
el mismo gusto a pozo seco
en la saliva dulce
y el mismo olvido
por las cenizas del aire.

Quiso retener
el tiempo entre los dedos
contando las monedas de las horas,
las únicas ganancias
que traían las luces
nuevas de la primavera.

Sintió ser feliz
por un momento,
como si tuviese el don
de resucitar a las mariposas.

Le amaneció sentado.

Se levantó,
cambió de piedra
y siguió mirando al mismo horizonte
con los mismos ojos
vigilantes de pájaros.

Juan José Vélez Otero

lunes, 20 de diciembre de 2010

Oración

Madre nuestra
que estás en las aguas,
que estás en la tierra roja,
que estás en el fuego de las entrañas
y en el aire preñado de cada tarde.
Escribo cada día
con la esperanza
de bendecir tu nombre,
tu nombre y tu enigma
que, como el aliento,
contiene todos los nombres conocidos
y todos los nombres desconocidos;
tu nombre, que he olvidado,
pero que deshojo
cada noche
como una flor nocturna.
Vuelva a nosotros
la Tierra sin reinos
donde una vez la humanidad fue niña.
Hágase tu voluntad,
que une raíces, tallos y hojas
y enhebra con un hilo de sangre
a vivientes y no vivientes;
pero deshágase la mentira,
que arranca y niega,
pedazo a pedazo, nuestra leve
_________________existencia.
Danos hoy,
aunque nunca haya sido nuestro,
el pan de cada día,
así como la encina o la espiga
prodigan sus frutos con la sabiduría
de quien sabe que tan sólo
se posee aquello que se da.
Y aliméntanos también con tu
_____________________palabra,
que recrea, recompone y pare,
cada mañana,
la carne azul del mundo.
Perdónanos nuestra ignorancia
porque, cuando pedimos libertad,
debimos haber reclamado justicia.
No nos dejes confundir
la limpieza con la muerte
y líbranos del olvido.

Carlos Bozalongo

viernes, 17 de diciembre de 2010

LLUVIA DE OCTUBRE

Con el olor de la lluvia se aproximan
las remotas caravanas del recuerdo.
Abandonan su equipaje de añoranza
en los portales de una calle anónima.
El sabor de la lluvia posee aromas de infancia,
cadencias de lavanda y pellizcos de ciclamen.
Un tapiz de intenso gris cubre la argamasa del cielo
y las copas de los árboles recortan el paisaje
con la dimensión de un adiós o un hasta luego
que busca semillas de sol en la distancia.
El olor de la lluvia, de la tierra mojada,
nos recoge en el claustro de la meditación,
en el aula reservada para aprendices de náufragos
condenados a ser eternos arlequines de agua.
En estas horas escritas con zumo de limón
las lágrimas pesan como goterones de plomo,
como las monedas sin lustre de la tristeza
hurtadas de la hucha secreta del corazón baldío.
El viento pregona los poemas de la ausencia
entre los portales de la ciudad vencida por el agua;
y una voz solitaria, ebria de roble y de tanino,
acuña el silencio en el vaho de la ventana.
La lluvia es el poema de los que se fueron.

José Luis García Herrera

miércoles, 15 de diciembre de 2010

Por tus ojos

(A Widad)

Por tus ojos y los de los niños del mundo
por esa sonrisa que anuncia el día liberado
mendigo la esperanza
el pan
y un día
de alegría

Por tus ojos y los de los niños del mundo
Por esas manitas que acarician la
alcoba
fabricaré un juguete de piedra lunar
cosido con rayos de ternura

Por tus ojos y los de los niños del mundo
por esa voz argentina que se te encalla en
la garganta
voy a tocar el tambor
pero
jamás olvides niña mía
que
por tus ojos y los de los niños del mundo
hay hombres que mueren cada día al sol
por no haber podido vencer a tiempo
a los ladrones de sueños

Hamid Skif


lunes, 13 de diciembre de 2010

Cuando yo aún soy la vida

La vida me rodea, como en aquellos años
ya perdidos, con el mismo esplendor
de un mundo eterno. La rosa cuchillada
de la mar, las derribadas luces
de los huertos, fragor de las palomas
en el aire, la vida en torno a mí,
cuando yo aún soy la vida.
Con el mismo esplendor, y envejecidos ojos,
y un amor fatigado.

¿Cuál será la esperanza? Vivir aún;
y amar, mientras se agota el corazón,
un mundo fiel, aunque perecedero.
Amar el sueño roto de la vida
y, aunque no pudo ser, no maldecir
aquel antiguo engaño de lo eterno.
Y el pecho se consuela, porque sabe
que el mundo pudo ser una bella verdad.

Francisco Brines

viernes, 10 de diciembre de 2010

MI PADRE

Quizás mi padre
es el aroma de la tarde regado en las aldeas
y la fragancia del amanecer goteando en calma
lavado por el canto de los gallos
y el sonido distante de un trabajador que tose en el barro
y el despertar de las mujeres a las cocinas de la mañana
y el regreso del verde en el paisaje lejano.
Quizás mi padre es la sangre que enciende la noche con canciones
y el humo que se eleva de las casas de huéspedes
y el fluir del Éufrates a través de las goteras en los viaductos
Y mi padre...
la canción temblorosa golpeando la puerta de la princesa

Y mi padre... un minarete
elevando su corazón con un cántico anhelante
y una copa inquieta
y una mano soñadora con barro sollozando
y mi padre de un exceso de añoranza,
encadena su alma a las profundidades del Éufrates
y le canta a la tierra de la caña de azúcar
mi padre,
una chispa en la historia de la fatiga.

BASSEM AL MERAIBY

miércoles, 8 de diciembre de 2010

El mundo despiadado

Con motivo del bombardeo de Halabache
y el silencio mortal del ámbito mundial

Despierta! O mundo despiadado
caprichoso mundo despiadado
Hasta cuándo este silencio mortal?
la piedra incluso ha comenzado a llorar
Hace mucho tiempo que sueñas y en vano
has manchado tus garras con la sangre de la verdad
Hace mucho tiempo que está muerta la bondad
la opresión está llena de color y de engaño
el mundo estádormido, dormido,
Cuidado o hombre mohíno!
despierta para que juntos borremos
las manchas de la maldad de la faz de la tierra
déjanos construir un mundo grato
cristalino y transparente como el amor

Fatema Rakei

sábado, 4 de diciembre de 2010

lunes, 29 de noviembre de 2010

Consejos para amar a las mujeres.

Conviérteme en amuleto de tu pecho.
Te protegeré del pecado.
Silencia tu lengua. Habla con el corazón.
Se te revelarán mis secretos.
Tómame como soy, una mujer.
Te devolveré a tus orígenes,
a tus raíces,
a las aguas de tu esencia.
Persigue mi perfume.
Ten paciencia ante mis enigmas.
Qué hombre antes de ti
sondeó los secretos de una mujer.
Sé el nectar que irriga mis raíces.
Poda lo sobrante de mis ramas:
me abriré, flor eterna, en tus palmas.
Píntame: sombra de tus nubes,
lloveré de pudor
cada vez que tu aliento me roce.
Acumúlame: lágrima en tus párpados,
fluiré cuando el arbol de tu tristeza florezca.
Escóndeme como contraseña en tus líneas,
como un grano de fragancia en tu tinta,
memoriza mi nombre,
mantenlo secreto:
el poeta que revela el nombre de su amada
anuncia la muerte del poema.
No te fíes de la miel que fluye de mis labios:
dolor para tus heridas son sus gotas.
Antaño, capturé mi rostro en el espejo del río,
me cautivé de mi hermosura y te amé,
eres el hijo de la abundancia de mi deseo.
¡Ten cuidado!
Si dejas escapar de las manos mi fragilidad,
seré tu eterno sufrimiento.

AÏCHA BASSRY

sábado, 27 de noviembre de 2010

HAY NIÑOS

Hay niños,
Que viven sobre la tierra pero sin tierra;
Excluidos, siguen los caminos férreos;

Hay niños,
De un mundo sin alma y de un mundo sin padre;
Éticas, como los arbustos de los desiertos;

Hay niños,
Con la mirada interrogando la ausencia;
Ignoran la fiesta, el ritmo, la danza;

Hay niños,
Inocentes en los bordes de los senderos;
No tienen siquiera deseos de mendigar;

Hay niños
Que han perdido la fuerza de llorar;
Sin sueño, aprenden a caminar;

Hay niños,
Círculos viciosos; cadenas y mordaza;
Comisaría; Justicia-Prisión,

Hay niños,
Que mueren en la vida, nacidos en la muerte;
Tienen sed de todo, incluso de la muerte.

Frédéric Pacéré Titinga

jueves, 25 de noviembre de 2010

SÉ TODOS LOS CUENTOS

Yo no sé muchas cosas, es verdad.
Digo tan sólo lo que he visto.
Y he visto:
que la cuna del hombre la mecen con cuentos,
que los gritos de angustia del hombre los ahogan con cuentos,
que el llanto del hombre lo taponan con cuentos,
que los huesos del hombre los entierran con cuentos,
y que el miedo del hombre...
ha inventado todos los cuentos.
Yo no sé muchas cosas, es verdad,
pero me han dormido con todos los cuentos...
y sé todos los cuentos.

León Felipe

martes, 23 de noviembre de 2010

TÚ ME VES YO TE VEO

Como espesas cebollas, así vamos,
revestidos de capas,
ocultando (sin querer o queriendo)
nuestro fondo.
Distinta es la sonrisa que sacamos
cada vez del bolsillo. Y cambiante
la biografía, de la que seleccionas
piezas distintas para usos distintos,
cuidándote muy bien, al agitar la taza,
de no ir a revolver el sedimento.
Pero hay momentos
en que quedamos
expuestos, desprovistos
de nuestras envolturas.
Tú me ves, yo te veo. El otro lee
en tus entrañas un sentido oscuro.
Y tú adivinas
en su gesto lo sucio. Y él lo sabe.
Un pacto se ha sellado, partido por la herida.
Cada uno es juez y reo. A un mismo tiempo
víctimas y verdugos implacables.

Piedad Bonett

domingo, 21 de noviembre de 2010

EL PAN NUESTRO DE CADA DÍA

Las mujeres se sientan detrás de sus sueños a esperar por los hombres
y los hombres no vienen.

Las mujeres les quitan la cáscara,
les echan sal y azúcar,
los ponen al fuego,
les dan vuelta y vuelta.

Y los hombres no vienen.

Y se pasan, se pasan...

Y los sacan del horno.
Y se van hasta el patio.
Y se los comen.
Solas.

Milena Rodríguez Gutiérrez

viernes, 19 de noviembre de 2010

AL CABO

Al cabo, son muy pocas las palabras
que de verdad nos duelen, y muy pocas
las que consiguen alegrar el alma.
Y son también muy pocas las personas
que mueven nuestro corazón, y menos
aún las que lo mueven mucho tiempo.
Al cabo, son poquísimas las cosas
que de verdad importan en la vida:
poder querer a alguien, que nos quieran
y no morir después que nuestros hijos.

Amalia Bautista

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Anciano en la espesura


Un anciano atraviesa la espesura,
camina entre las ramas del silencio
bajo un cielo crispado que desciende
con su lento nublar sobre la tarde.

Como una red tupida de hojarasca
esparcida a la sombra de este bosque,
así es su corazón ya deshojado
que acaricia la luz con mansedumbre.

Con su hatillo de días y el semblante
de quien no ha visto nada en el sendero,
un anciano atraviesa la espesura,
le da, con su mirar, significado.

Juan Antonio Bernier

lunes, 15 de noviembre de 2010

Amanece en el bosque

Me acerco hasta la puerta. El aire es frío
como el gélido lienzo de una cama vacía
y, aún conmocionado, lo acojo quedamente.
Hay pájaros cantando que, invisibles,
reclaman la atención hacia las hojas
que el bosque solicita. A ras de suelo
lo roza una neblina sin raíces
Procuro no pensar. Quisiera devolverle
la familiar mirada con que el bosque nos mira.
Atento a lo contiguo, observo -me demoro-
la neblina inconsciente.
 
 
 Juan Antonio Bernier


sábado, 13 de noviembre de 2010

Hoy estoy sin saber yo no sé cómo

Hoy estoy sin saber yo no sé cómo,
hoy estoy para penas solamente,
hoy no tengo amistad,
hoy sólo tengo ansias
de arrancarme de cuajo el corazón
y ponerlo debajo de un zapato.
Hoy reverdece aquella espina seca,
hoy es día de llantos en mi reino,
hoy descarga en mi pecho el desaliento
plomo desalentado.
No puedo con mi estrella,
y me busco la muerte por las manos
mirando con cariño las navajas,
y recuerdo aquel hacha compañera,
y pienso en los más altos campanarios
para un salto mortal serenamente.
Si no fuera ¿por qué? no se por qué,
mi corazón escribiría una postrera carta,
una carta que llevo ahí metida,
haría un tintero de mi corazón,
una fuente de sílabas, de adioses y regalos,
y ahí te quedas, al mundo le diría.
Yo nací en mala luna.
Tengo la pena de una sola pena
que vale más que toda la alegría.
Un amor me ha dejado con los brazos caídos
y no puedo tenderlos hacia más.
¿No veis mi boca qué desengañada,
que inconformes mis ojos?
Cuanto más me contemplo más me aflijo:
cortar este dolor ¿con qué tijeras?
Ayer, mañana, hoy
padeciendo por todo
mi corazón, pecera melancólica,
penal de ruiseñores moribundos.
Me sobra el corazón.
Hoy descorazonarme,
yo el más descorazonado de los hombres,
y por el más, también el más amargo.
No sé por qué, no sé por qué ni cómo
me perdono la vida cada día.

Miguel Hernández

viernes, 12 de noviembre de 2010

La mujer más fea del mundo

La mujer más fea del mundo
me hablaba de tratamientos faciales gratuitos
mientras ponía en mi mano un folleto

con la mujer más bella del mundo.

Ha sido a las 10 de la mañana.

La mujer más fea del mundo
debe entregar 500 folletos diarios
de la mujer más bella del mundo

para ganar 587 euros al mes.

Nadie mira a la cara de la mujer más fea del mundo.

Nadie se atreve.

Carmen Ruiz Fleta

martes, 9 de noviembre de 2010

OPINIONES

Un hombre deseaba violentamente a una mujer,
a unas cuantas personas no les parecía bien,
un hombre deseaba locamente volar,
a unas cuantas personas les parecía mal,
un hombre deseaba ardientemente la Revolución
y contra la opinión de la gendarmería
trepó sobre muros secos de lo debido,
abrió el pecho y sacándose
los alrededores de su corazón,
agitaba violentamente a una mujer,
volaba locamente por el techo del mundo
y los pueblos ardían, las banderas.

Juan Gelman

domingo, 7 de noviembre de 2010

NOTA XXVI



de lo posible a lo probable/del
sueño a la realidad hay como
mares/playas nocturnas donde
animales de pico descarnan
formas mojadas por los jugos
del corazón/así/viajamos
del pecho al seco sol que dora
la maravilla/o existir

Juan Gelman

viernes, 5 de noviembre de 2010

AMOR VIRTUAL

"No seas tan loco. Sé educado. Sé correcto.
No bebas. No fumes. No tosas. No respires.
¡Ay, sí, no respirar!..."
Gabriel Celaya


Ahora que las autoridades sanitarias
se vuelven poetas
-No beses
no des la mano,
di hola-.

Ahora que parece hora
de mirar para otro lado
-da de beber al sediento,
usa vaso de plástico,
recicla tu solidariad-.
Ahora que es tiempo de ceniza
mejor,
no me beses
no me des la mano,
no me saludes.
No me interesa
tu pornografía de imperativo,
tu solidaridad de urgencia
tu rutina de pancarta
tu humanidad inmunodeficiente.

(El amor siempre fue sospechoso para la salud)

Lola Crespo

domingo, 31 de octubre de 2010

Imprecación

...Pero pon en las manos de Africa el pan que te sobra
y del hambre de Mozambique te daré los restos de tu gula
y verás cómo también te llena la nada que te restituyo
de mis banquetes de sobras.

Que para mí
todo el pan que me das es todo
lo que tú desechas, Europa!

José João Craveirinha

viernes, 29 de octubre de 2010

CONTADME HOY

Tened presente el hambre
Miguel Hernández



Yo, Precario Sanz, sucesivamente despedido y contratado con menos derechos cada vez, también he parado, contadme. El rotundo silencio de este amanecer se ha hecho también con el mío, pero nadie lo habrá contado.

Yo, Subcontratada Sánchez, peonza de todos los caminos de cuya nómina sorben todos los pistoleros, también he hecho este silencio, pero nadie lo habrá contado.

Yo, Itinerante Ruiz, nómada por doce horas subterráneas, electricista o profesor por cuatro, también he hecho este silencio, pero nadie lo habrá contado.

Yo, Temporera Pérez, que concentro en contratos de dos horas la tarea que debe hacerse en ocho, también he hecho este silencio, pero nadie lo habrá contado.

Yo, Autónomo Gutiérrez, dueño único de mi hambre, también he hecho este silencio, pero nadie lo habrá contado.

Yo, Mínima Bermúdez, mínima seiscientas treinta y tres veces, con treinta céntimos, trabajadora agrícola por todo el día, también he hecho este silencio, pero nadie lo habrá contado.

Yo, Subsidiario González, perceptor de una Beneficencia decimonónica de 420 euros, también he hecho este silencio, pero nadie lo habrá contado.

Yo, Becaria Rodríguez, experta en todas las incertidumbres, también he hecho este silencio, pero nadie lo habrá contado.

Yo, Embargado Rupérez, aplastado por una hipoteca, imposibilitado para el descuento de una jornada de huelga, también he hecho este silencio, pero nadie lo habrá contado.

Yo, Simpapeles García, asistenta que no consta en lugar alguno de trabajo, también he hecho este silencio, pero nadie lo habrá contado.

Yo, Parcial Fernández, expulsado de toda protección social, supérstite humano gracias a contribuciones en especie, también he hecho este silencio, pero nadie lo habrá contado.

Contadme, el sol, que sale para todos, hoy ha hablado más claro, gracias al rotundo silencio de este amanecer, que también se ha hecho con el mío. Contadme hoy, 29 de septiembre de 2010.



Mª Ángeles Maeso

miércoles, 27 de octubre de 2010

EL CIRCO

El circo estaba anunciado y todos asistieron,
sabían que venía el trapecista,
el mago con su hermosa ayudante,
el domador de tigres, los monos juguetones
y los payasos…
Lo que no sabían era que varios presidentes y otros políticos
asistirían como parte de la función.

DIANAMAR CARVAJAL

lunes, 25 de octubre de 2010

La imagen del lobo en la luna

La imagen del lobo está en la luna
Y el viento ha borrado todo;
Sólo se oye la música del abismo
Y la arena es los únicos pasos posibles;
La noche que aparece por debajo de la nieve,
La cruza el único hombre de la ciudad
En busca de un farolillo;
El hombre y la noche
Son viejos amigos,
Se acompañan y se ayudan
Como dos ciegos,
Y van caminando en busca de un farolillo
Colgado en la puerta de una taberna.

BASSEM AL MERAIBY

sábado, 23 de octubre de 2010

Quiero un viernes...II

Nosotros
los de abajo
y la sonrisa triste
los de la voz fuerte
y la rabia contenida.
Nosotros
los de las noches
con olor a aguardiente
y mañana de pan duro.
nosotros
los que fundimos la esperanza
en las manos
los que sabemos que la tierra
está preñada de una fértil venganza.
Nosotros
los que nunca tuvimos oportunidad
de nada
arrancamos en un grito
la voz de todos
cada mañana.

Orietta Lozano

martes, 19 de octubre de 2010

POESIA VERTICAL XI, PARTE IV - POEMA 28

No existen paraísos perdidos.
El paraíso es algo que se pierde todos los días,
como se pierden todos los días la vida,
la eternidad y el amor.
Así también se nos pierde la edad,
que parecía crecer
y sin embargo disminuye cada día,
porque la cuenta es al revés.
O así se pierde el color de cuanto existe,
descendiendo como un animal amaestrado
escalón por escalón,
hasta que nos quedamos sin color.
Y ya que sabemos además
que tampoco existen paraísos futuros,
no hay más remedio, entonces,
que ser el paraíso.

ROBERTO JUARROZ

domingo, 17 de octubre de 2010

IV Há no silêncio do ar

IV
há no silêncio do ar
uma paz autorizada…
um murmúrio lírico
no renascimento
de cada momento.
o pássaro brinca entre uma nota de assobio
e um sopro de vento.
a borboleta adormece — encantada.

(…)

para haver paz
há que caminhar silêncios.
----------------------------------
IV
hay en el silencio del aire
una paz autorizada…
un murmullo lírico
en el renacimiento
de cada instante.
el pájaro juguetea entre una nota del silbido
y un soplo de viento.
la mariposa adormece — encantada.

(…)

para tener paz
hay que caminar silencios.

viernes, 15 de octubre de 2010

V (Quiero la ternura)

quiero la ternura
de la sombra.
del árbol.
su frescor
su candor.
quiero su tronco
sólido
la suavidad de su savia
la dureza de su raiz.
quiero la paz de sus hojas
acostadas
deleitadas
adormeciéndose — en la paz del tiempo.

NDALU DE ALMEIDA ( ONDJAKI )

miércoles, 13 de octubre de 2010

Bajo fianza de las nubes

Tengo nostalgia de un país
en el que nunca estuve,
donde todos los árboles y las flores
me conocen,
al que nunca voy,
pero donde las nubes
se acuerdan exactamente
de mí,
un extranjero que
en casa alguna
puede desahogarse llorando.

Viajo
hacia islas sin puerto,
tiro al mar las llaves
inmediatamente al zarpar.
No arribo a ninguna parte.
Mi vela es como una telaraña,
pero no se rompe.
Y allende el horizonte,
donde los grandes pájaros
al final de su vuelo
secan las alas al sol,
hay un continente
donde me deben recoger
sin pasaporte,
bajo fianza de las nubes.


Hilde Domin

lunes, 11 de octubre de 2010

De paso

No es el tiempo
el que pasa.
Eres tú
que te alejas
apresuradamente
hacia la sombra,
y vas dejando caer,
como el que se despoja
de sus bienes,
todo aquello que amaste,
las horas
que te hicieron la dicha,
amigos
en quienes hubo un día
refugio tu tristeza,
sueños
inacabados.
Al final, casi
vacías las manos,
te preguntas
en qué momento
se te fue la vida,
se te sigue yendo,
como u hilo de agua
entre los dedos.

Meira Delmar

sábado, 9 de octubre de 2010

PORQUE SOMOS HUMANOS

Conozco el dolor que sientes, amada mía, cuando miras
a los cielos y ves el humo de los cañones, cuando escuchas
el percutir de los tambores de la guerra, y cuando ves los soldados
dirigiéndose a matar y a ser asesinados sin razón ni causa. Conozco
el dolor que sientes al escuchar el llanto de los niños por el frío
el hambre, la orfandad. Conozco el
dolor que sientes cuando piensas en las mujeres que se venden
a sí mismas para alimentar a sus hijas e hijos. Conozco el
dolor que sientes cuando hablas de la gente que no tiene
comida, ni vestidos, ni hogar. Conozco el dolor que sientes cuando ves al
rico volverse más rico y al pobre más pobre. Conozco el dolor que sientes cuando ves al pobre, al débil, al oprimido sin voluntad, sin visión, sin esperanza. Conozco el dolor que sientes porque tú y yo somos humanos. Pero el rico y el codicioso, el malvado y el avaro no tienen sentimientos, no tienen consciencia, ¡ni vergüenza!

Arif Khudairi

jueves, 7 de octubre de 2010

MONROVIA 2008

Sobre las aceras, parches de gente
se quedan atrás.

De día, son como granos de arroz
a lo largo de las carreteras,

y de noche,
empapelan cuerpos lisiados
en la bosquejada oscuridad
de la ciudad rota.

Multitudes de repatriados de la guerra,
aguardando por nada,
día tras día,

esperando por nada,
después que su campo de refugiados,
después que sus ciudades de refugio

los vomitaron como porquería,
después de vagar por el globo.
Al paso de la muerte,
ellos han vuelto

semejantes a repatriados
de la muerte.
La ciudad está hambrienta, hierve,
arde como el acero.

Era usual que aquí el aire nos perteneciera
dijo una mujer,
era usual que hubiera un camino
que nos trajera de vuelta a casa.

Hoy en día, el camino de vuelta a casa se perdió
La carretera a Cabo de Palmas, rebosa
de huesos secos.

Mas por la calle,
se aproxima una marcha.
Alguien está vivo.
Alguien vive encima de esos huesos

(Traducción de Rafael Patiño Góez)

Patricia Jabbeh Wesley

martes, 5 de octubre de 2010

SI ALGÚN DÍA LLEGA

Si algún día llega
que este mundo
que nos han hecho
empieza a quedarnos
estrecho a todos

y no sólo a unos cuantos

si algún día llega
que todos comemos
caliente

y no sólo unos cuantos

y vestimos o no
a voluntad

si algún día llega
que las medicinas
curan a todos
y merece la pena
llegar a viejo
sin dormirse
frente al televisor

digo que si algún
día llega...

quiero que me coja
como siempre
con los que nada tienen

y espero que para entonces
el festejo por la victoria
en campeonatos deportivos
no sea la máxima aspiración
de sus vidas

será la prueba definitiva
de que la dignidad
se ha instalado
entre nosotros.

Vicent Camps

domingo, 3 de octubre de 2010

Poema

Yo Mercadoneo
tú Carrefureas
él Leroymerlinea
nosotros Ikeamos
vosotros Eroiskeais
ellos Corteinglesean.

Todos al fin
con código de barras.

Especimen-consumista-deshumanizado.

Obejetivo cumplido.

Antonio Martínez i Ferrer

miércoles, 29 de septiembre de 2010

COREOGRAFÍA

En fin
que no he vivido nada.
No sé qué cosa es una guerra
y tengo como prisión al cuerpo
y alma como campo de batalla.

Me debato entre la duda
de reflexionar o fluir;
esto es situarse en el palco de los espectadores,
o estar
en cada íntimo instante del milagro.

Vivo de pedacitos,
pero aspiro a la totalidad,
es decir a Mozart y al poema que me redima
y me revele los espacios absolutos
y la nada.

Percibo de mí
los sitios más secretos:
la culpa,
una tercera conciencia de las cosas,
la dualidad del pensamiento,
la ira pequeña
por lo que ya ocurrió.
Pero he vivido poco. Treinta años.
Dos amores de piel
y un querer abandonar
esta espera que me señala la vida.

Anhelo la anarquía,
el más tierno desorden del amor,
la cábala
los relojes de arena y una habitación sencilla.

Quiero tener un destino trazado de antemano,
encontrarme con Dios
y los abismos
y no tener conciencia de la llama.
Ser la llama misma y la aventura.

Pero vengo de soledades últimas,
de conversaciones que nunca concluyeron,
de espejos que me miraron desde la infancia hasta ahora,
de abandonados armarios de caoba que fueron
de tías o de abuelas remotísimas.

Cuán poco he vivido.
No conozco la guerra. Y tampoco la paz.
Me duele la orfandad,
el desarraigo,
el sentirme extranjera en cualquier sitio,
el no pertenecer
a una familia o a una patria.

No puedo narrar una batalla;
ni hablar del hambre y de la peste,
ni escribir la canción de algún soldado herido,
ni hablar de mujer violada,
ni decir cómo es un cementerio después de una llovizna.

Pero anhelo decir en el poema
que la vida me conmueve,
que respiro mejor cuando me entrego,
que necesito amar de la manera más simple y primitiva.
Me gusta la paz y la defiendo
y la guerra cuando es justa,
y el sabor de las mandarinas cuando llega el verano,
que me gusta ser una y arraigarme en el cosmos,
y sentir que mi vida palpita al mismo tiempo que la vida,
aunque no haya vivido,
aunque mi hambre sea de infinito,
aunque no sepa expresar
que por alguna razón precisa estoy aquí,
a punto de vencer,
a punto de morir,
de vivir.

Mía Gallegos

lunes, 27 de septiembre de 2010

ZONAS HÚMEDAS

los campesinos contemplan las zonas húmedas / (charcas /
dadoras de vida) / como desperdicios abandonados /
por las manos del hombre / (tierra perdida /
para la fértil labranza) / como una deshonesta /
proposición del olvido /

los urbanitas contemplan las zonas húmedas /
(paraísos ha bitables por intrusos) /
(agua estancada a orillas de los sueños) /
como si la materia fango / (les oliera /
a tercermundista) / como si entre las zonas húmedas /
y ellos / hubiese de por medio una raya equidistante /

los gobernantes contemplan las zonas húmedas /
(con ojos sabihondos de empresarios de la construcción) /
como espacios concéntricos / (vasijas de barro) /
preparadas para recibir el polen que /
derraman en sus fornicaciones los mosquitos /

Eladio Orta

sábado, 25 de septiembre de 2010

POEMA

Te escribo, Juan,
hermano,
ahora que la lluvia
recorta suavemente
los ruidos en la calle
para hablarte de que ayer,
allá arriba,
en el pueblo vacío
del lento somontano,
enterramos a la abuela
en aquel cementerio
cubierto de hierbajos,
arbustos,
y lápidas deshechas
por el tiempo,
las nieves
y el olvido.
Mientras ella yacía
en la alcoba tan grande
donde tú y yo
jugábamos de niños,
estuvimos la noche
recordando los tiempos,
los paisajes pasados,
las gentes que se fueron,
las tardes de domingo en la fuente,
que ahora
ya no mana aquella agua
que venía del frío.
Tantos trozos de vida recordamos
que el alba nos asaltó de golpe,
y el abuelo,
que apenas dijo nada de nadie
entre la noche,
murmuró suavemente:
Habrá que descenderla
y dejarla en la tierra
con los suyos.
Y la dejamos quieta
allí, bajo la yerba,
las nubes pasajeras,
los cierzos agoreros
y los riscos.
Luego, cuando salimos
ya no quedaba nadie
en el contorno.
Y aquí
en la ciudad de nuevo,
el abuelo,
viendo caer el agua
tras los vidrios
ha murmurado lento,
con sonrojo:
Hoy seguro que llueve
también
sobre la abuela
allá arriba
en el pueblo.

José Antonio Labordeta

miércoles, 22 de septiembre de 2010

EL ÁRBOL

---Permanece en silencio, solitario,
en mitad de la plaza
como un pájaro olvidado
o quizás como una nube amaestrada
por vientos tramontanos
No es ni sombra ni cobijo
de pájaros urbanos. No es, apenas,
el pudor de la tierra
izándose desde la tierra misma
hacia los cielos. Es, tan sólo,
un árbol ciudadano
bajo de mi ventana, más próximo al cemento
que a las grandes praderas
donde están sus hermanos
asentados. Tiene la palidez
de un empleado de banco y la turbia
timidez de los abandonados. Tan sólo
cuando pierde las hojas
recuerdo que es un árbol y lo amo.

José Antonio Labordeta

martes, 21 de septiembre de 2010

Mientras vosotros estáis con los grafismos

Mientras vosotros estáis con los grafismos
contándome la historia de los tiempos
escribo en el silencio de las aulas
palabras nostálgicas, recuerdos.
Mientras vosotros habláis de socialismos,
de movimiento obrero, de Bismarck el guerrero,
contemplo los objetos perdidos en el cielo
y escribo versos, tiernos versos de amor y regocijo.
Mientras crecéis para hombres y mujeres
y del ojo infantil os cuelga tanta vida,
asumo nostálgico este tiempo
que apenas si me queda entre mis dedos.
Mientras vosotros vais,
yo vengo.
Doloroso es cruzarse en el camino.

José Antonio Labordeta

lunes, 20 de septiembre de 2010

PRIMER RECUERDO (de mi padre)

Hoy marzo y siete. ¿Recuerdas? Yo recuerdo.
Soy vivo y te recuerdo: Íntegramente puro,
siempre igual. Diste la mano a quien te dio la mano
y arrancaste el odio a quien te odió de espaldas.
¿Recuerdas? Ya casi primavera, olor a campo,
en las viejas ventanas del colegio -alguien dijo
que tu labor no fue importante.
¡Hay cosas, padre, que son mejor
guardarlas en silencio! -Alumnos con charangas
saludaban tu paso. También tu muerte -fuimos todos
contigo al cementerio- y veían tu pureza total
y sentían tu voz contra sus frentes.
Hoy ya marzo, otra vez, tanto tiempo te has ido
que recuerdo el dolor que te produjo
amar la libertad como la amaste.

José Antonio Labordeta

domingo, 19 de septiembre de 2010

VIDA

Ella corta las cebollas finamente.
Un obrero de construcción, de 25 años, cae hacia su muerte.

Ella agrega cilantro, clavos y jengibre.
Un soldado, de 21 años, pisa una mina al borde del camino.

Ella saca las albóndigas de la nevera.
Un periodista, de 43 años, recibe un tiro en la cabeza.

Ella revuelve la salsa a bajo fuego
y añade algunas lágrimas a la olla.

Noviembre 2, 2006

Lola Koundakjian

Canto a la libertad

Habrá un día en que todos
Al levantar la vista
Veremos una tierra
Que ponga libertad (bis)

Hermano aquí mi mano
Será tuya mi frente
Y tu gesto de siempre
Caerá sin levantar
Huracanes de miedo
Ante la libertad

Haremos el camino
En un mismo trazado
Uniendo nuestros hombros
Para así levantar
A aquellos que cayeron
Gritando libertad

Sonarán las campanas
Desde los campanarios
Y los campos desiertos
Volverán a granar
Unas espigas altas
Dispuestas para el pan

Para un pan que en los siglos
Nunca fue repartido
Entre todos aquellos
Que hicieron lo posible
Para empujar la historia
Hacia la libertad

También será posible
Que esa hermosa mañana
Ni tú, ni yo, ni el otro
La lleguemos a ver
Pero habrá que empujarla
Para que pueda ser

Que sea como un viento
Que arranque los matojos
Surgiendo la verdad
Y limpie los caminos
De siglos de destrozos
Contra la libertad

José Antonio Labordeta

sábado, 18 de septiembre de 2010

SIN REMEDIO

si nos cortan las patas / ya ves /
andaremos sin patas / qué remedio /
que nos cortan las alas / no podremos volar /
construiremos barriletes / qué remedio /
si nos cortan las manos / ofú /
con los dientes escribiremos / qué remedio /
que nos cortan las orejas / sin sonidos /
el olfato desarrollaremos / qué remedio /
que nos tapan la boca / mala cosa /
del aire comeremos / qué remedio /
del aire moriremos / alondras de los rastrojos /
si nos asfaltan los campos / sin remedio /

(los ojos para qué los queremos a estas alturas) /

Eladio Orta

jueves, 16 de septiembre de 2010

EXILIO

Mi patria eran tus manos,
tu mirada,
el suave temblor de tus labios.

Ya no tengo tu hombro
para mi cabeza rendida.

No tengo nada.

Veinte años de exilio,
amor mío,
veinte años sin patria.

Maruja Vieira

lunes, 13 de septiembre de 2010

SOBREVIVIENTE

Recuerdo el tiempo en que la gente se saludaba.
Éramos personas recordándonos que había amanecido.
Hoy, hoscos rostros esquivan la mirada. Aquellos hombres ya murieron
Y yo soy el cronista resurrecto de un pasado que nadie recuerda.

Yo sí lo recuerdo: el agua tenía gusto a agua
Y se podía escuchar en cualquier calle el canto de los pájaros.
Había niños que eran niños. Hoy los niños están presos
en mármoles oscuros, detrás de nobles escritorios.
Presos sin padres. ¿Quién rompió el círculo?
Mañana alguien dirá que esto es mentira. Por eso lo escribo:
para decir que yo lo recuerdo. Había ángeles.

Yo mismo era un niño. Mi madre cuidaba las begonias
en un patio donde a veces llovía. Mi madre también sonreía a veces
y esto es algo que yo escribo para que se lo recuerde.
¿Quién rompió el noble oficio del carpintero
Y de los maderos sólo hicieron cruces? Paraísos había en mi vereda,
dulces cuerpos oscuros, elevando sus brazos venerables.
¿Quién envenenó el agua, quién la mirada de los hombres, quién
o qué elemento desconocido por la ciencia, enmudeció el saludo?

Dios andaba por todas partes.

Después, vino la guerra.

Alejandro Seta

viernes, 10 de septiembre de 2010

NO ES una cuestión de hombros

NO ES una cuestión de hombros
ni de bíceps
la carga del mundo
Los que la llegan a llevar
son a menudo los más frágiles
Ellos también están sujetos al miedo
a la duda
al desánimo
y llegan a veces a maldecir
la Idea o el Sueño espléndidos
que les expusieron
al fuego de la gehena
Pero si se doblan
no se rompen
y cuando por frecuente desgracia
se les corta y mutila
esos juncos humanos
saben que sus cuerpos horadados
por la traición
se convertirán en otras tantas flautas
que unos pastores del alba se llevaran a la boca
para captar
y escoltar hasta las estrellas
la sinfonía de la resistencia

(De “Tribulations d’un rêveur attitré”
[”Tribulaciones de un soñador titular”], 2008)

Abdellatif Laâbi

miércoles, 8 de septiembre de 2010

ESTÁS LISTO

¿ESTÁS LISTO para amar
sin conocer la última palabra de la historia
sin preguntar el nombre
la procedencia y el destino?
Amar bajando los ojos
sin devorar la mano que aprietas
sin fuego ni cortafuego
de deseos ni ultrajes
Amar de cerca
y más todavía de lejos
Amar como respirar
sin defensa ni chaleco salvavidas
en la hoguera de las purificaciones
y la tempestad de las pasiones inconfesables
¿Estás preparado para vivir
de ese amor
de agua fresca
y de tu plumaje de pájaro común
ardiendo en el fuego de la utopía
del que no se sabe
si quedarán cenizas?

(De “Écris la vie” [“Escribe la vida”], 2005)

Abdellatif Laâbi

lunes, 6 de septiembre de 2010

De qué hablamos cuando hablamos del tiempo

De qué hablamos cuando hablamos del tiempo
De qué hablamos cuando decimos
esto, aquello, lo otro,
lo que siempre regresa,
lo que se va y no vuelve.
Las palabras se dicen aquí, en este momento
y retornan a su eterno sistema de silencio.

Y qué es el silencio...
el silencio es un brazo que se aleja,
la llama que se extingue,
las cenizas del fuego.
Y también es la tierra y el cielo,
el árbol y la lluvia,
cuando aún no han sido nombrados
y esperan existir en los labios humanos


Y hablamos y decimos
tiempo
y esto, aquello y lo otro.
Y al renacer en nombre
enmudecen las fuentes,
y se callan los ríos...


En el fondo del alma
hay un mar de silencio.

Teresa Martín Taffarel

jueves, 2 de septiembre de 2010

Mar eterno

Digamos que no tiene comienzo el mar
Empieza donde lo hallas por vez primera
y te sale al encuentro por todas partes

José Emilio Pacheco

martes, 13 de julio de 2010

Aquí no llega el rumor

Aquí no llega el rumor
de la ciudad; aquí el cielo
pone sobre el campo verde
su paz y su sentimiento (...)
Y es tan dulce ver pasar
todo... y estarse en silencio,
soñando en una mujer
que aún no ha dado ningún beso...

Juan Ramón Jiménez

domingo, 11 de julio de 2010

Claros sentimientos

Sin pies y sin cabeza
cómo puedes tú correr
sin ojos y sin lágrimas
cómo vas a nacer.
Creo que caminas
sin mirarte en los demás
que pasas por la vida
sin saber reír
sin saber florar.
Tú estás en la tierra
y yo voy volando,
Tú eres de piedra
y morirás esperando
tú vas por la tierra
y yo voy volando
tú eres de piedra
y morirás esperando.
Sin sangre y sin angustia
cómo puedes tú gritar,
sin manos ni deseos
qué cuerpo has de abrazar.
Sin labios ni caricias
qué boca podrás besar,
sin arriesgar sentimientos
no podrás sufrir
no podrás amar.

Hilario Camacho

viernes, 9 de julio de 2010

Volar es para pájaros

Hace tiempo era un niño buen cazador de nubes
y es que al cielo subía por sumas de escaleras,
trepando por la hierba de luz del arco-iris
o por los hilos de sol de mis cometas.

Ahora quiero volar. Sé que antes del silencio,
antes del bien y el mal, del cruel y del tirano,
paseaba por el mundo sobre angeles y cosas
un hombre libre con alas en las manos.

Y ahora vuelvo a volar. Tengo unas alas blancas
con que arañar el aire, romper el horizonte,
viajar hasta ciudades lejanas como sueños,
y enseñarles a todos que es posible la vida.

Suben a mi ventana gritos alucinados,
chirridos de sirena arañándome entero
y voces de "estás loco, volar es para pájaros".
Pero extiendo mis alas, miro hacia el cielo y salto,
miro hacia el suelo y caigo.

Pablo Guerrero

miércoles, 7 de julio de 2010

Mi ración de alegría

Defiendo la alegría,
la precaria, amenazada,
difícil alegría,
al raso, limpia, en cueros,
mi ración de alegría.
No me arrastréis al pozo
de las verdes culebras.
No os arrojo a la cara mi alegría,
os la tiendo tan sólo
como una débil luz, como una mano.
No es ningún baluarte
ni ningún ofensivo privilegio,
es mi único utensilio cotidiano,
mi tela de labor.
No tengo otra bandera
y ostenta unos colores ya un poco desteñidos;
mirad que la levanto a duras penas,
contra viento y marea,
sin sombra alguna de provocación.
Es parcela pequeña, minifundio,
terreno sin cercados ni aparceros
que aro, riego y abono por mí misma,
don fe, de sol a sol.
Tomad el pobre o rico,
el cuestionable fruto
que desde ella os ofrezco,
pues sólo desde aquí
os consigo mirar, ayudar, entender,
poner tal vez en claro alguna cosa.
No me la reprochéis ni adobéis de negrura
como un reducto inmundo, segregado;
ved que no la defienden ni pinchos ni alambradas
y que podéis pasar aquí conmigo al sol.
No me arrastréis al pozo de las verdes culebras.

Carmen Martín Gaite

lunes, 5 de julio de 2010

LO QUE ESPERAMOS

Tardará, tardará.

Ya sé que todavía
los émbolos,
la usura,
el sudor,
las bobinas
seguirán produciendo,
al por mayor,
en serie,
iniquidad,
ayuno,
rencor,
desesperanza;
para que las lombrices con huecos portasenos,
las vacas de embajada,
los viejos paquidermos de esfínteres crinudos,
se sacien de adulterios,
de hastío,
de diamantes,
de caviar,
de remedios.

Ya sé que todavía pasarán muchos años
para que estos crustáceos
del asfalto
y la mugre
se limpien la cabeza,
se alejen de la envidia,
no idolatren la saña,
no adoren la impostura,
y abandonen su costra
de opresión,
de ceguera,
de mezquindad.
de bosta.

Pero, quizás, un día,
antes de que la tierra se canse de atraernos
y brindarnos su seno,
el cerebro les sirva para sentirse humanos,
ser hombres,
ser mujeres,
-no cajas de caudales,
ni perchas desoladas-,
someter a las ruedas,
impedir que nos maten,
comprobar que la vida se arranca y despedaza
los chalecos de fuerza de todos los sistemas;
y descubrir, de nuevo, que todas las riquezas
se encuentran en nosotros y no bajo la tierra.

Y entonces...
¡Ah!, ese día
abriremos los brazos
sin temer que el instinto nos muerda los garrones,
ni recelar de todo,
hasta de nuestra sombra;
y seremos capaces de acercarnos al pasto,
a la noche,
a los ríos,
sin rubor,
mansamente,
con las pupilas claras,
con las manos tranquilas;
y usaremos palabras sustanciosas,
auténticas;
no como esos vocablos erizados de inquina
que babean las hienas al instarnos al odio,
ni aquellos que se asfixian
en estrofas de almíbar
y fustigada clara de huevo corrompido;
sino palabras simples,
de arroyo,
de raíces,
que en vez de separarnos
nos acerquen un poco;
o mejor todavía
guardaremos silencio
para tomar el pulso a todo lo que existe
y vivir el milagro de cuanto nos rodea,
mientras alguien nos diga,
con una voz de roble,
lo que desde hace siglos
esperamos en vano.

Oliverio Girondo

viernes, 2 de julio de 2010

QUIERO TODO ESTO

Quiero ser informado de todo lo que ocurre al más alto nivel
Quiero ver a la gente uno por uno
Quiero que me amnistíen por todo lo que pienso hacer de
.........ahora en adelante
Quiero entrar en los cines sin pagar
Quiero que una persona de fiar escoja mis camisas y nunca se
.........equivoque
Quiero un informe sobre el comportamiento sexual de los
.........sexólogos
Quiero que los cocineros no sean obscenos
Quiero que ordenen llevar camisa azul a todos los que en su
.........día la llevaron
Quiero que no me den gato por liebre
Quiero que el socialismo vaya sin más directamente al grano
Quiero aprender inglés en 15 días
Quiero saber con precisión exacta la verdadera forma del
.........Universo
Quiero que los croissants siempre estén calentitos y sabrosos
Quiero misas de culo y en latín
Quiero saber si el papel higiénico de la Real Academia limpia
.........fija y da esplendor
Quiero ser la Madre Abadesa
Quiero que se prohiban los canalones y la plusvalía
Quiero que el Imperio Romano no siga decayendo de este
.........modo
Quiero que fichen a la policía
Quiero comer Potitos Bledine
Quiero el control de natalidad con carácter retroactivo
Quiero que se sepa que el Presidente de U.S.A. barre para su
.........casa de una manera descarada
Quiero amor
Quiero lanzarme en plancha y rematar marcando el sexto gol al
.........Real Madrid
Quiero que Manolo no se quede calvo
Quiero saber si alguien me está robando los calzoncillos
Quiero entablar un Juicio
Quiero volver a merendar en la terraza con mis primas y Tía
.........Catalina
Quiero que me homologuen en Ohio
Quiero que alguien me nombre su Delegado en el Exterior
Quiero que Reus sea puerto de mar
Quiero que me devuelvan la gabardina que me quitaron el 17
.........de Noviembre de 1949 en el Cine Carretas
Quiero que Dios exista
Quiero que los Catedráticos de estética no sean tan feos
Quiero ser de derechas
Quiero jugar al mus
Quiero que no menoscaben mi integridad
Quiero tener aparcamiento reservado dondequiera que vaya
Quiero bailar rock
Quiero que le salga un sarpullido al Santo Padre
Quiero una mantita en la barriga a la hora de la siesta
Quiero que se firmen todos los acuerdos
Quiero destituir a Bing Crosby de un modo fulminante
Quiero fugarme con la morterada
Quiero comer centollo con Julia y con la Ton
Quiero triunfar como una bestia
Quiero que no se me invite otra vez a disolverme pacíficamente
Quiero que emplumen a San Valentín
Quiero que Cataluña llegue hasta el Tirol
Quiero un felpudo igual que el del vecino
Quiero considerar seriamente la posibilidad de que me
.........expulsen de cualquier país
Quiero unas garantias mínimas
Quiero que se suprima la circulación periférica
Quiero que en las cajas de quesitos hayan más quesitos
Quiero a las Islas Filipinas
Quiero que se eliminen las condiciones objetivas ya que por
.........culpa de ellas todo sale mal
Quiero que no tiren más a nuestras mujeres
Quiero tirarme a alguien
Quiero controlar el gasto Público partida por partida
Quiero ser bueno
Quiero que se me paguen daños y perjuicios
Quiero que cada pueblo tenga el gobierno que no se merezca
Quiero que no me avergüencen más en las autopistas
Quiero que no haya clase obrera
Quiero que trasladen las Fallas de Valencia
Quiero que no vuelvan los buenos tiempos
Quiero revolcarme en la alfombra del Hotel des Templaires
Quiero ser hábilmente interrogado para cantarlo todo a la
.........primera friega
Quiero sardinas en escabeche y pan tostado con aceite y sal
Quiero ascender por méritos de guerra
Quiero que se me incapacite legalmente para no ser ya nunca
.........responsable de nada
Quiero que no me maten la ilusión
Quiero que no vuelvan a salir goteras en el techo
Quiero que todo el mundo cobre más
Quiero que no se me hinche la barriga
Quiero que me convenzan
Quiero un poco de caridad cristiana
Quiero que todos pasen por el tubo
Quiero un nuevo cepillo de dientes.

Quiero todo esto.
Yo no puedo seguir viviendo así:
es una decisión irrevocable.

José Agustí Goytisolo

martes, 29 de junio de 2010

PALABRAS PARA JULIA

Tú no puedes volver atrás
porque la vida ya te empuja
como un aullido interminable.

Hija mía es mejor vivir
con la alegría de los hombres
que llorar ante el muro ciego.

Te sentirás acorralada
te sentirás perdida o sola
tal vez querrás no haber nacido.

Yo sé muy bien que te dirán
que la vida no tiene objeto
que es un asunto desgraciado.

Entonces siempre acuérdate
de lo que un día yo escribí
pensando en ti como ahora pienso.

La vida es bella, ya verás
como a pesar de los pesares
tendrás amigos, tendrás amor.

Un hombre solo, una mujer
así tomados, de uno en uno
son como polvo, no son nada.

Pero yo cuando te hablo a ti
cuando te escribo estas palabras
pienso también en otra gente.

Tu destino está en los demás
tu futuro es tu propia vida
tu dignidad es la de todos.

Otros esperan que resistas
que les ayude tu alegría
tu canción entre sus canciones.

Entonces siempre acuérdate
de lo que un día yo escribí
pensando en ti
como ahora pienso.

Nunca te entregues ni te apartes
junto al camino, nunca digas
no puedo más y aquí me quedo.

La vida es bella, tú verás
como a pesar de los pesares
tendrás amor, tendrás amigos.

Por lo demás no hay elección
y este mundo tal como es
será todo tu patrimonio.

Perdóname no sé decirte
nada más pero tú comprende
que yo aún estoy en el camino.

Y siempre siempre acuérdate
de lo que un día yo escribí
pensando en ti como ahora pienso.

José Agustín Goytisolo

domingo, 27 de junio de 2010

Esta noche

Que sepulten la utopía,
dame clases de poesía
con tu cuerpo esta noche.

Que incineren los glaciares...
Voy a hundirme en los mares
de tu cuerpo esta noche.

Ante tanta pesadilla,
haz, amigo que reencuentre
el sentido de los sueños
en tu vientre esta noche.

Que se apunten sus misiles,
quiero guerras inciviles
con tu cuerpo esta noche;

que construyan su futuro...
no levantes ningún muro
en tu cuerpo esta noche.

Que combatan Dios y Ciencia,
sólo admito la violencia
de tu cuerpo esta noche;

que se pudra tanta mierda...
di que quieres que me pierda
por tu cuerpo esta noche.

Que sepulten la utopía,
dame clases de poesía
con tu cuerpo esta noche.

Que se coman sus banderas,
sacia mi hambre de quimeras
con tu cuerpo esta noche;

que gobiernen los piratas,
pondré letras escarlatas
en tu cuerpo esta noche.

Que sepulten la utopía,
dame clases de poesía
con tu cuerpo esta noche.

Luis Eduardo Aute

jueves, 24 de junio de 2010

CHE GUEVARA

Contra ti se irguió la prudencia de los inteligentes y el arrojo de los necios
La indecisión de los complicados y el primitivismo
De aquellos que confunden revolución con revancha

De afiche en afiche tu imagen atraviesa la sociedad de consumo
Como el Cristo en sangre atraviesa el orden enajenado de las iglesias

Sin embargo
Frente a tu rostro
Medita el adolescente por la noche en su cuarto
Cuando intenta emerger de un mundo que se pudre.

Sophia de Mello Breyner Andresen

martes, 22 de junio de 2010

LAS PERSONAS SENSIBLES

Las personas sensibles no son capaces
De matar gallinas
Pero son capaces
De comer gallinas

El dinero huele a pobre y huele
A la ropa de su cuerpo
Aquella ropa
Que después de la lluvia se secó sobre el cuerpo
Porque no tenían otra
Porque huele a pobre y huele
A ropa
Que después del sudor no fue lavada
Porque no tenían otra

"Ganarás el pan con el sudor de tu rostro"
Así nos fue impuesto
Y no:
"Con el sudor de los otros ganarás el pan"

Oh vendedores del templo
Oh constructores
De las grandes estatuas huecas y pesadas
Oh llenos de devoción y de provecho

Perdónalos Señor
Porque ellos saben lo que hacen

Sophia de Mello Breyner Andresen

domingo, 20 de junio de 2010

Aviso urgente de Ruanda

Faltan manos urgentes para repartir alimentos
para sepultar a los muertos
para apartar a esa dama negra
que se contonea insolente entre los cuerpos.
Faltan manos y pies
y un cargamento humanitario de caricias
faltan cientos de toneladas de energía
un poblado entero de paciencia
un pozo sin fondo de altruismo
y una minúscula, tan sólo una minúscula
dosis de vergüenza.

Faltan ataúdes, cruces,
abrazos, convicciones,
madres en potencia,
falta suero, ladrillos,
canciones de cuna, decisiones,
sobredosis de ternura con urgencia.

Faltan palabras,
demasiadas palabras para acabar el poema.

Gloria Bosch

viernes, 18 de junio de 2010

Poetas y poesía

De José Saramago a raíz de la muerte de Mario Benedetti

No será con todos ni será siempre, pero a veces ocurre lo que estamos viendo estos días: que, porque ha muerto un poeta, aparecen en todo el mundo lectores de poesía que se declaran devotos de Mario Benedetti, que necesitan un poema que exprese su desconsuelo y tal vez también para recordar un pasado en que la poesía tuvo un lugar permanente, cuando hoy es la economía la que nos impide dormir. Así, vemos que de repente se establece un tráfico de poesía que habrá dejado perplejos los medidores oficiales, porque de un continente a otro saltan mensajes extraños, de factura original, líneas cortas que parecen decir más de lo que a primera vista se cree. Los descifradores de códigos no dan abasto, demasiadas enigmas para descodificar, demasiados abrazos y demasiada música acompañando sentimientos que son demasiados: el mundo no podría soportar muchos días de esta intensidad emocional, pero tampoco, sin la poesía que hoy se expresa, seríamos enteramente humanos. Y esto, en pocas líneas, es lo que está sucediendo: murió Mario Benedetti en Montevideo y el planeta se hizo pequeño para albergar la emoción de las personas. De súbito los libros se abrieron y comenzaron a expandirse en versos, versos de despedida, versos de militancia, versos de amor, las constantes de la vida de Benedetti, junto a su patria, sus amigos, el fútbol y algunos boliches de trago largo y noches todavía más largas.

Murió Benedetti, ese poeta que supo hacernos revivir nuestros momentos más íntimos y nuestras rabias menos ocultas. Si con sus poemas salimos a la calle – codo a codo somos mucho más que dos -, si leyendo “Geografías”, por ejemplo, aprendimos a amar un país pequeño y un continente grande, ahora, según las cartas que llegan a la Fundación, se recuperan momentos de amor que dieron sentido a tiempos pasados, y quién sabe si presentes. Eso también se lo debemos a Benedetti, el poeta que al morir hizo de nosotros herederos del bagaje de una vida fuera de lo común.

http://cuaderno.josesaramago.org

Pues el tiempo no para

Pues el tiempo no para, nada importa
que los días vividos aproximen
el vaso de agua amarga colocado
donde la sed de vida se exaspera.
No contemos los días que pasaron:
fue hoy cuado nacimos. Solo ahora
la vida comenzó, y, lejos aún,
la muerte ha de cansarse en nuestra espera.

José Saramago

jueves, 17 de junio de 2010

EL CIUDADANO DESCONOCIDO

El Departamento de Estadística descubrió que era
alguien contra quien no había queja oficial,
y todos los informes sobre su conducta coinciden
en que, en el sentido moderno de una palabra anticuada, era un santo,
pues en todo lo que hizo sirvió a la Gran Comunidad.
Salvo por la guerra hasta el día de su jubilación
trabajó en una fábrica y nunca fue despedido,
sino que satisfizo a sus patronos, Motores Fudge S.A.
Y sin embargo no era un esquirol ni tenía opiniones extrañas,
pues su Sindicato informa que cumplió con su deber
(nuestro informe sobre su Sindicato indica que era de fiar)
y nuestros trabajadores de Psicología Social descubrieron
que era estimado entre sus compañeros y le gustaba ir de copas.
La prensa está convencida de que compraba el periódico todos los días
y sus reacciones a la publicidad eran normales en todos los sentidos.
Las pólizas hechas a su nombre demuestran que estaba asegurado
(a todo riesgo,

y su cartilla de Atención Sanitaria indica que ingresó una vez
(en el hospital pero salió curado.

Tanto Sondeo de Producción como Alto Nivel de Vida declaran
que tenía actitud sensata entre las ventajas del Pago a Plazos
y poseía todo lo que necesita el Hombre Moderno,
fonógrafo, radio, coche y frigorífico.
Nuestros investigadores de Opinión Pública están convencidos
de que tenía las opiniones adecuadas según la época del año;
cuando había paz, estaba a favor de la paz, cuando hubo guerra, acudió.
Se casó y aportó a la población cinco hijos,
lo que era el número adecuado para un progenitor de su generación
(según nuestro Eugenista,

y nuestros maestros atestiguan que nuca se entrometió en su educación.
¿Era libre? ¿Fue feliz? La pregunta es absurda:
si algo hubiera ido mal, con toda seguridad nos hubiéramos enterado.

W.H. AUDEN

lunes, 14 de junio de 2010

Quiero cantarte un beso

Quiero cantarte un beso,
mas todo se confunde
entre un millón de huesos
y derrumbes.
Así que el beso huye
con ojos de reproche,
mientras la sangre fluye
por las noches.

La muerte se ha regado
por toda la pradera.
A aquel que la ha sembrado
¿qué le espera?
Dicen que el responsable
nunca ha gastado cuernos,
sino un traje impecable
en los infiernos.

Y vuelve la necesidad
de repasarme dónde estoy,
si existe o no la humanidad
y si se ha visto hoy.

La esfera agonizando
todos los días explota
y nadie está mirando
que está rota.
Treinta y cinco mil niños
mataron ese día.
La tele no hizo un guiño
todavía.

Y vuelve la necesidad
de repasarme dónde estoy,
si existe o no la humanidad
y si se ha visto hoy.

Grandes ilusionistas
con hazañas de alarde,
dicen que son altruistas
los cobardes.
Mientras el poderoso
más ordena y más traga
y el pequeño ripioso
siempre paga.

Y vuelve la necesidad
de repasarme dónde estoy,
si existe o no la humanidad
y si se ha visto hoy.

Creí que nadie estaba,
que nada respondía,
pero el amor velaba
todavía.
Y el viejo centinela,
en medio del desierto,
prendió infinitas velas
por los muertos.

Silvio Rodríguez

viernes, 11 de junio de 2010

Conozco bien los caminos

Conozco bien los caminos
conozco los caminantes
del mar, del fuego, del sueño,
de la tierra, de los aires.
Y te conozco a ti
que estás dentro de mi sangre.

Miguel Hernández

miércoles, 9 de junio de 2010

CONTRIBUCIÓN A LA ESTADÍSTICA

De cada cien personas,
las que todo lo saben mejor:
cincuenta y dos.

Las inseguras de cada paso:
casi todo el resto.

Las prontas a ayudar,
siempre que no dure mucho:
hasta cuarenta y nueve.

Las buenas siempre,
porque no pueden de otra forma:
cuatro o quizá cinco.

Las dispuestas a admirar sin envidia:
dieciocho.

Las que viven continuamente angustiadas
por algo o por alguien:
setenta y siete.

Las capaces de ser felices:
como mucho veintitantas.

Las inofensivas de una en una,
pero salvajes en grupo:
más de la mitad seguro.

Las crueles
cuando las circunstancias obligan:
eso mejor no saberlo
ni siquiera aproximadamente.

Las sabias a posteriori:
no muchas más
que las sabias a priori.

Las que de la vida no quieren nada más que cosas:
cuarenta,
aunque quisiera equivocarme.

Las encorvadas, doloridas
y sin linterna en lo oscuro:
ochenta y tres,
tarde o temprano.

Las dignas de compasión:
noventa y nueve.

Las mortales:
cien de cien,

cifra que por ahora no sufre ningún cambio.

Wislawa Szymborska

lunes, 7 de junio de 2010

Melancolía

Cuando pienso en los años
aquellos, en los días
del amor y el deseo,
siento melancolía.
Ni tú ni yo sabíamos
vivir entonces sin la
urgencia de encontrarnos,
sin respirar la dicha
imprescindible y única
de estar juntos. Ardía
una llama en nosotros
que eterna parecía.
Pero ha pasado el tiempo
por tu vida y la mía.
Y en esto se ha resuelto
al fin la maravilla:
ya no te necesito,
ni tú me necesitas.
Qué terrible es que nada
dure, que en la semilla
de cuanto llega a ser
la muerte esté escondida.
El fuego más hermoso
concluye en la ceniza,
la luz se vuelve sombra
y la verdad, ¿mentira?

Eloy Sánchez Rosillo

viernes, 4 de junio de 2010

Un árbol es el bosque

Un árbol es el bosque.
Tenderse bajo su follaje
es escuchar todo el sonido,
conocer todos los vientos
del invierno y del verano,
recibir toda la sombra del mundo.
Detenerse bajo sus ramas sin hojas
es rezar todas las oraciones posibles,
callar todos los silencios,
tener piedad por todos los pájaros.

Pararse junto a su tronco
es levantar toda la meditación,
reunir todo el desapego,
adivinar el calor de todos los nidos,
juntar la solidez de todos los reparos.

Un árbol es el bosque.
Pero para eso hace falta
que un hombre sea todos los hombres.
O ninguno.

ROBERTO JUARROZ

miércoles, 2 de junio de 2010

SILENCIO

En esta fría transparencia
Se abre el silencio
Como el limpio despliegue
Del verdadero espacio al fin recuperado

Por fin se oyen las voces
Toda verdad susurra
Todo lo que está vivo es misterioso.

Tomás Segovia

domingo, 30 de mayo de 2010

miércoles, 26 de mayo de 2010

El arroyo

Ha pasado mucha agua bajo los puentes
y enormes cantidades de sangre
Pero a los pies del amor
corre un gran arroyo blanco
Y en los jardines de la luna
en los que cada día se celebra tu fiesta
ese arroyo canta mientras duerme
Y esa luna es mi cabeza
donde gira un enorme sol azul
Y ese sol son tus ojos

Jaques Prévert

lunes, 24 de mayo de 2010

EL CLUB DE LAS MUJERES MUERTAS

A las que se rebelan,
no se callan;
las humildes y las mansas,
Las que imaginan cosas, imposibles,
el derecho a ser felices.

A las que viven solas, pisoteadas,
las que ya no esperan nada;
A las desamparadas olvidadas,
las que caen y se levantan.

Cuántas vidas humilladas,
cuántas lágrimas calladas.
Lo más triste es la tristeza
en el club de las mujeres muertas.

A veces porque miran,
porque callan,
porque piensan, se delatan.
A veces porque cuentan,
porque lloran,
o porque no entienden nada.

Hay quien perdona todo
a quien las mata,
por un beso, una mirada.
Hay quien lo espera todo de quien ama,
y no pierde la esperanza.

Cuántas vidas humilladas,
cuántas lágrimas calladas.
Lo más triste es la tristeza
en el club de las mujeres muertas.

Quemadas, arrastradas por los pelos,
torturadas, devastadas,
violadas legalmente,
apuñaladas,
algún juez las mira y pasa.
Dicen que tienen celos
y se nublan, que no saben lo que hicieron,
y cuando beben dicen
no ser ellos, yo soy yo más este infierno

Cuántas vidas humilladas
cuántas lágrimas calladas.
Lo más triste es la tristeza
en el club de las mujeres muertas.

Víctor Manuel

sábado, 22 de mayo de 2010

COSAS QUE ME DAN PENA

Las cajeras del Día
los viejos y las viejas.
La asistenta y su hija
aprendiendo en la Celsa
que un chinito no engancha
y a los veinte la entierran.
Los amores que tuve
el milagro que dejan.
El amor recibido
el amor que aún me tiembla.
Me da pena mi casa,
la mesita de Ikea,
el frío, la estufita,
mi madre y sus tarteras.
Me da pena que acabe.
Me da pena si empieza.
Los balcones del centro
sus visillos gris perla.
La espalda del polaco
con su bombona a cuestas.

Me da pena ir al Rastro,
el negro sin licencia.


Me da pena internet
navegando a dos velas,
autistas afectivos...
sin una boca cerca,
manoseando un ratón
pornográfica técnica.
Las pelis de la dos.
Tragarse la tristeza.
Me dan pena los lunes
peinaditos de fiesta.
Los ojos de mi perro
el parque y la cadena.
Me da pena el atasco
la casita en la sierra.
Los carros del Alcampo
los créditos vivienda.
Me da pena quererte
y que tú no me quieras
seguir sin ti viviendo
o hacer que me lo crea.
Me da pena escribir
estos versos que enredan
mi pecho con su lana
y la sed de tejerla.
No escribo para mí
esto es del que lo lea.

Belén Reyes

jueves, 20 de mayo de 2010

PODER DE LA POESIA

Invento el amor porque soy poeta
y las palabras son el palacio de humo
en el que vivo
en el que hago y deshago la realidad
invocando noches y mañanas exquisitamente inmóviles
en las que imagino que haciendo el amor
hago un mundo entero
océanos y bosques
y toda una generación de niños azules.
Yo invento las palabras para decir
te abrazo y subo sobre tus hombros
porque allí decidí poner la torre desde donde mirar
el paisaje verde que quiero hacer que exista
un paisaje de sombras y helechos gigantes
donde agazapados duendes mordisquean
hongos venenosos sin morirse
y vos me mirás con los ojos de un animal manso
que me ha jurado lealtad y
que me ve como el principio y el fin de todo.
Yo hago que tus manos se acerquen a mi cara
y acaricien apenas rozando el contorno más leve de mi oreja,
la barbilla, la nariz, el borde tembloroso con que mis labios
balbucean tu nombre,
y digo que tu boca cerque mi cuello y muerda
la delgada extensión de mis clavículas
y hago que mi piel se piense isla,
territorio de tus huellas de explorador
y digo que el agua te reciba
para que nadés en el cenote de mi gruta espesa
y que allí tu cetro me corone de reina, de diosa, de musa,
de única mujer flamígera, incendio,
que aspirando pronuncia el amor
desprovista de miedo, de modestia,
de toda sensatez.
Yo y mis palabras tomamos tu gesto más trivial
y lo alzamos como ofrenda de pan bueno
en el altar de las adoraciones.
Nada que hagás conmigo conocerá el desperdicio.
Yo lo tomaré, lo transfiguraré
y te ceñiré hombre que me has amado
con el laurel de los héroes
para que nunca duermas
para que despiertes y me ames
página tras página
hasta el día aciago
en que ardan en las Alejandrías
de la historia
las polvosas y antiguas
bibliotecas.

GIOCONDA BELLI

martes, 18 de mayo de 2010

Me llamarán, nos llamarán a todos.

1

Me llamarán, nos llamarán a todos.
Tú, y tú, y yo, nos turnaremos,
en tornos de cristal, ante la muerte.
Y te expondrán, nos expondremos todos
a ser trizados ¡zas! por una bala.

Bien lo sabéis. Vendrán
por ti, por ti, por mí, por todos.
Y también
por ti.

(Aquí no se salva ni dios, lo asesinaron.)

Escrito está. Tu nombre está ya listo,
temblando en un papel. Aquél que dice:
abel, abel, abel...o yo, tú, él...

2

Pero tú , Sancho Pueblo,
pronuncias anchas sílabas,
permanentes palabras que no lleva el viento..

Blas de Otero

domingo, 16 de mayo de 2010

Como tú...

Así es mi vida,
piedra,
como tú. Como tú,
piedra pequeña;
como tú,
piedra ligera;
como tú,
canto que ruedas
por las calzadas
y por las veredas;
como tú,
guijarro humilde de las carreteras;
como tú,
que en días de tormenta
te hundes
en el cieno de la tierra
y luego
centelleas
bajo los cascos
y bajo las ruedas;
como tú, que no has servido
para ser ni piedra
de una lonja,
ni piedra de una audiencia,
ni piedra de un palacio,
ni piedra de una iglesia;
como tú,
piedra aventurera;
como tú,
que tal vez estás hecha
sólo para una honda,
piedra pequeña
y
ligera.

León Felipe

jueves, 13 de mayo de 2010

NO TE DETENGAS

No dejes que termine el día sin haber crecido un poco,
sin haber sido feliz, sin haber aumentado tus sueños.
No te dejes vencer por el desaliento.
No permitas que nadie te quite el derecho a expresarte,
que es casi un deber.
No abandones las ansias de hacer de tu vida algo extraordinario.
No dejes de creer que las palabras y las poesías
sí pueden cambiar el mundo.
Pase lo que pase nuestra esencia está intacta.
Somos seres llenos de pasión.
La vida es desierto y oasis.
Nos derriba, nos lastima,
nos enseña,
nos convierte en protagonistas
de nuestra propia historia.
Aunque el viento sople en contra,
la poderosa obra continúa:
Tu puedes aportar una estrofa.
No dejes nunca de soñar,
porque en sueños es libre el hombre.
No caigas en el peor de los errores:
el silencio.
La mayoría vive en un silencio espantoso.
No te resignes.
Huye.
"Emito mis alaridos por los techos de este mundo",
dice el poeta.
Valora la belleza de las cosas simples.
Se puede hacer bella poesía sobre pequeñas cosas,
pero no podemos remar en contra de nosotros mismos.
Eso transforma la vida en un infierno.
Disfruta del pánico que te provoca
tener la vida por delante.
Vívela intensamente,
sin mediocridad.
Piensa que en ti está el futuro
y encara la tarea con orgullo y sin miedo.
Aprende de quienes puedan enseñarte.
Las experiencias de quienes nos precedieron
de nuestros "poetas muertos",
te ayudan a caminar por la vida
La sociedad de hoy somos nosotros:
Los "poetas vivos".
No permitas que la vida te pase a ti sin que la vivas ...

Walt Whitman

lunes, 10 de mayo de 2010

Utopías

Cómo voy a creer
que el mundo se quedó sin utopías
cómo voy a creer
que la esperanza es un olvido
o que el placer una tristeza
cómo voy a creer
que el universo es una ruina
aunque lo sea
o que la muerte es el silencio
aunque lo sea
cómo voy a creer
que el horizonte es la frontera
que el mar es nadie
que la noche es nada
cómo voy a creer
que tu cuerpo
no es algo más de lo que palpo
o que tu amor
ese remoto amor que me destinas
no es el desnudo de tus ojos
la parsimonia de tus manos
cómo voy a creer
que sos tan sólo lo que miro
acaricio o penetro
cómo voy a creer
que la útopia ya no existe
si vos
osada / eterna
si vos / sos mi utopía.

viernes, 7 de mayo de 2010

HOMBRE QUE MIRA MÁS ALLÁ DE SUS NARICES

Hoy me despierto tosco y solitario
no tengo a nadie para dar mis quejas
nadie a quien echar mis culpas de quietud

sé que hoy me van a cerrar todas las puertas
y que no llegará cierta carta que espero
que habrá malas noticias en los diarios
que la que quiero no pensará en mí

y lo que es mucho peor
que pensarán en mi los coroneles
que el mundo será un oscuro
paquete de angustias
que muchos otros aquí o en cualquier parte
se sentirán también toscos y solos
que el cielo se derrumbará
como un techo podrido
y hasta mi sombra
se burlará de mis confianzas

menos mal
que me conozco

menos mal que mañana
o a más tardar pasado
sé que despertaré alegre y solidario
con mi culpita bien lavada y planchada
y no solo se me abrirán las puertas
sino tambien las ventanas y las vidas
y la carta que espero llegará
y la leeré seis o siete veces
y las malas noticias de los diarios
no alcanzarán a cubrir las buenas nuevas
y la que quiero
pensará en mi hasta conmoverse
y lo que es muchísimo mejor
los coroneles me echarán al olvido
y no solo yo muchos otros tambien
se sentirán solidarios y alegres
y a nadie le importará
que el cielo se derrumbe
y más de uno dirá que ya era hora
y mi sombra empezará a mirarme con respeto

será buena
tan buena la jornada
que desde ya
mi soledad se espanta.

Mario Benedetti

miércoles, 5 de mayo de 2010

Oficina y denuncia

Debajo de las multiplicaciones
hay una gota de sangre de pato.
Debajo de las divisiones
hay una gota de sangre de marinero.
Debajo de las sumas, un río de sangre tierna.
Un río que viene cantando
por los dormitorios de los arrabales,
y es plata, cemento o brisa
en el alba mentida de New York.
Existen las montañas, lo sé.
Y los anteojos para la sabiduría,
Lo sé. Pero yo no he venido a ver el cielo.
Yo he venido para ver la turbia sangre,
la sangre que lleva las máquinas a las cataratas
y el espíritu a la lengua de la cobra.
Todos los días se matan en New York
cuatro millones de patos,
cinco millones de cerdos,
dos mil palomas para el gusto de los agonizantes,
un millón de vacas,
un millón de corderos
y dos millones de gallos
que dejan los cielos hechos añicos.
Más vale sollozar afilando la navaja
o asesinar a los perros
en las alucinantes cacerías
que resistir en la madrugada
los interminables trenes de leche,
los interminables trenes de sangre,
y los trenes de rosas maniatadas
por los comerciantes de perfumes.
Los patos y las palomas
y los cerdos y los corderos
ponen sus gotas de sangre
debajo de las multiplicaciones;
y los terribles alaridos de las vacas estrujadas
llenan de dolor el valle
donde el Hudson se emborracha con aceite.
Yo denuncio a toda la gente
que ignora la otra mitad,
la mitad irredimible
que levanta sus montes de cemento
donde laten los corazones
de los animalitos que se olvidan
y donde caeremos todos
en la última fiesta de los taladros.
Os escupo en la cara.
La otra mitad me escucha
devorando, orinando, volando en su pureza
como los niños en las porterías
que llevan frágiles palitos
a los huecos donde se oxidan
las antenas de los insectos.
No es el infierno, es la calle.
No es la muerte, es la tienda de frutas.
Hay un mundo de ríos quebrados
y distancias inasibles
en la patita de ese gato
quebrada por el automóvil,
y yo oigo el canto de la lombriz
en el corazón de muchas niñas.
Óxido, fermento, tierra estremecida.
Tierra tú mismo que nadas
por los números de la oficina.
¿Qué voy a hacer?, ¿ordenar los paisajes?
¿Ordenar los amores que luego son fotografías,
que luego son pedazos de madera
y bocanadas de sangre?
San Ignacio de Loyola
asesinó un pequeño conejo
y todavía sus labios gimen
por las torres de las iglesias.
No, no, no, no; yo denuncio.
Yo denuncio la conjura
de estas desiertas oficinas
que no radian las agonías,
que borran los programas de la selva,
y me ofrezco a ser comido
por las vacas estrujadas
cuando sus gritos llenan el valle
donde el Hudson se emborracha con aceite.

Federico García Lorca

sábado, 1 de mayo de 2010

El derecho al delirio

¿Qué tal si empezamos a ejercer el jamás proclamado derecho de soñar?
¿Qué tal si deliramos, por un ratito?
Vamos a clavar los ojos más allá de la infamia, para adivinar otro mundo posible:
El aire estará limpio de todo veneno que no venga de los miedos humanos y de las humanas pasiones;
En las calles, los automóviles serán aplastados por los perros;
La gente no será manejada por el automóvil, ni será programada por la computadora,
Ni será comprada por el supermercado, ni será mirada por el televisor;
El televisor dejará de ser el miembro más importante de la familia, y será tratado como la plancha o el lavarropas;
La gente trabajará para vivir, en lugar de vivir para trabajar;
Se incorporará a los códigos penales el delito de estupidez,
Que cometen quienes viven por tener o por ganar,
En vez de vivir por vivir nomás,
Como canta el pájaro sin saber que canta y como juega el niño sin saber que juega;
En ningún país irán presos los muchachos que se nieguen a cumplir el servicio militar,
Sino los que quieran cumplirlo;
Los economistas no llamarán nivel de vida al nivel de consumo,
Ni llamarán calidad de vida a la cantidad de cosas;
Los cocineros no creerán que a las langostas les encanta que las hiervan vivas;
Los historiadores no creerán que a los países les encanta ser invadidos;
Los políticos no creerán que a los pobres les encanta comer promesas;
La solemnidad se dejará de creer que es una virtud,
Y nadie tomará en serio a nadie que no sea capaz de tomarse el pelo;
La muerte y el dinero perderán sus mágicos poderes,
Y ni por defunción ni por fortuna se convertirá el canalla en virtuoso caballero;
Nadie será considerado héroe ni tonto por hacer lo que cree justo en lugar de hacer lo que más le conviene;
El mundo ya no estará en guerra contra los pobres, sino contra la pobreza,
Y la industria militar no tendrá más remedio que declararse en quiebra;
La comida no será una mercancía, ni la comunicación un negocio,
Porque la comida y la comunicación son derechos humanos;
Nadie morirá de hambre, porque nadie morirá de indigestión;
Los niños de la calle no serán tratados como si fueran basura, porque no habrá niños de la calle;
Los niños ricos no serán tratados como si fueran dinero, porque no habrá niños ricos;
La educación no será el privilegio de quienes puedan pagarla;
La policía no será la maldición de quienes no puedan comprarla;
La justicia y la libertad, hermanas siamesas condenadas a vivir separadas, volverán a juntarse, bien pegaditas, espalda contra espalda;
Una mujer, negra, será presidenta de Brasil y otra mujer, negra, será presidenta de los Estados Unidos de América;
Una mujer india gobernará Guatemala y otra, Perú.
En Argentina, las locas de Plaza de Mayo serán un ejemplo de salud mental,
Porque ellas se negaron a olvidar en los tiempos de la amnesia obligatoria;
La Santa Madre Iglesia corregirá las erratas de las tablas de Moisés, y el sexto mandamiento ordenará festejar el cuerpo;
La Iglesia también dictará otro mandamiento, que se le había olvidado a Dios: «Amarás a la naturaleza, de la que formas parte»;
Serán reforestados los desiertos del mundo y los desiertos del alma;
Los desesperados serán esperados y los perdidos serán encontrados,
Porque ellos son los que se desesperaron de tanto esperar y los que se perdieron de tanto buscar;
Seremos compatriotas y contemporáneos de todos los que tengan voluntad de justicia y voluntad de belleza,
Hayan nacido donde hayan nacido y hayan vivido cuando hayan vivido, sin que importen ni un poquito las fronteras del mapa o del tiempo;
La perfección seguirá siendo el aburrido privilegio de los dioses;
Pero en este mundo chambón y jodido, cada noche será vivida como si fuera la última y cada día como si fuera el primero.

Eduardo Galeano

jueves, 29 de abril de 2010

Me gusta, no me gusta

Me gusta desarrollar mi conciencia,
para comprender por qué estoy vivo, qué es mi cuerpo
y qué debo hacer para cooperar con los designios del universo.

No me gusta la gente que acumula datos inútiles
y se crea conductas inútiles postizas,
plagiadas de personalidades importantes.

Me gusta respetar a los otros,
no por las desviaciones narcisistas de su personalidad,
sino por su desarrollo interno.

No me gusta la gente cuya mente no sabe descansar en silencio,
cuyo corazón critica a los otros sin cesar,
cuyo sexo vive insatisfecho, cuyo cuerpo se intoxica,
sin saber agradecer estar vivo,
cada segundo de vida es un regalo sublime.

Me gusta envejecer. Porque el tiempo disuelve
lo superfluo y conserva lo esencial.

No me gusta la gente que por amarras infantiles
a mentiras las convierten en supersticiones.

No me gusta que haya un papa, que predica
sin compartir su alma con una papisa.
No me gusta que la religión esté en manos de hombres
que desprecian a las mujeres.

Me gusta colaborar y no competir.
Me gusta descubrir en cada ser esa joya eterna
que podríamos llamar dios interior.

No me gusta el arte que diviniza el ombligo de quien lo practica.
Me gusta el arte que sirve para sanar.
No me gustan los tontos graves.
Me gusta todo aquello que provoca la risa.

Me gusta enfrentar voluntariamente mi sufrimiento
con el objeto de expandir mi conciencia.

Alejandro Jodorowsky

martes, 27 de abril de 2010

La oración gestáltica

Yo soy yo y tú eres tú.
No estoy en el mundo para colmar tus expectativas,
ni tú estás en el mundo para colmar las mías.
Yo estoy para ser yo mismo y vivir mi vida y
tú estás para ser tú mismo/a y vivir tu vida.
Si nos encontramos será hermoso.
Si no nos encontramos no habrá nada que hacer.

Fritz Perls

domingo, 25 de abril de 2010

Desde los afectos

¿Cómo hacerte saber que siempre hay tiempo?

Que uno tiene que buscarlo y dárselo...
Que nadie establece normas, salvo la vida...
Que la vida sin ciertas normas pierde formas...
Que la forma no se pierde con abrirnos...
Que abrirnos no es amar indiscriminadamente...
Que no está prohibido amar...
Que también se puede odiar...
Que la agresión porque sí, hiere mucho...
Que las heridas se cierran...
Que las puertas no deben cerrarse...
Que la mayor puerta es el afecto...
Que los afectos, nos definen...
Que definirse no es remar contra la corriente...
Que no cuanto más fuerte se hace el trazo, más se dibuja...
Que negar palabras, es abrir distancias...
Que encontrarse es muy hermoso...
Que el sexo forma parte de lo hermoso de la vida...
Que la vida parte del sexo...
Que el por qué de los niños, tiene su por qué...
Que querer saber de alguien, no es sólo curiosidad...
Que saber todo de todos, es curiosidad malsana...
Que nunca está de más agradecer...
Que autodeterminación no es hacer las cosas solo...
Que nadie quiere estar solo...
Que para no estar solo hay que dar...
Que para dar, debemos recibir antes...
Que para que nos den también hay que saber pedir...
Que saber pedir no es regalarse...
Que regalarse en definitiva no es quererse...
Que para que nos quieran debemos demostrar qué somos...
Que para que alguien sea, hay que ayudarlo...
Que ayudar es poder alentar y apoyar...
Que adular no es apoyar...
Que adular es tan pernicioso como dar vuelta la cara...
Que las cosas cara a cara son honestas...
Que nadie es honesto porque no robe...
Que cuando no hay placer en las cosas no se está viviendo...
Que para sentir la vida hay que olvidarse que existe la muerte...
Que se puede estar muerto en vida...
Que se siente con el cuerpo y la mente...
Que con los oídos se escucha...
Que cuesta ser sensible y no herirse...
Que herirse no es desangrarse...
Que para no ser heridos levantamos muros...
Que sería mejor construir puentes...
Que sobre ellos se van a la otra orilla y nadie vuelve...
Que volver no implica retroceder...
Que retroceder también puede ser avanzar...
Que no por mucho avanzar se amanece más cerca del sol...

¿Cómo hacerte saber que nadie establece normas, salvo la vida?

Mario Benedetti

jueves, 22 de abril de 2010

ESE GRAN SIMULACRO

Cada vez que nos dan clases de amnesia
como si nunca hubieran existido
los combustibles ojos del alma
o los labios de la pena huérfana
cada vez que nos dan clases de amnesia
y nos conminan a borrar
la ebriedad del sufrimiento
me convenzo de que mi región
no es la farándula de otros

en mi región hay calvarios de ausencia
muñones de porvenir / arrabales de duelo
pero también candores de mosqueta
pianos que arrancan lágrimas
cadáveres que miran aún desde sus huertos
nostalgias inmóviles en un pozo de otoño
sentimientos insoportablemente actuales
que se niegan a morir allá en lo oscuro

el olvido está tan lleno de memoria
que a veces no caben las remembranzas
y hay que tirar rencores por la borda
en el fondo el olvido es un gran simulacro
nadie sabe ni puede / aunque quiera / olvidar
un gran simulacro repleto de fantasmas
esos romeros que peregrinan por el olvido
como si fuese el camino de santiago

el día o la noche en que el olvido estalle
salte en pedazos o crepite /
los recuerdos atroces y los de maravilla
quebrarán los barrotes de fuego
arrastrarán por fin la verdad por el mundo
y esa verdad será que no hay olvido.

Mario Benedetti

lunes, 19 de abril de 2010

Hasta mañana

Voy a cerrar los ojos en voz baja
voy a meterme a tientas en el sueño.
En este instante el odio no trabaja
para la muerte que es su pobre dueño
la voluntad suspende su latido
y yo me siento lejos, tan pequeño

que a Dios invoco, pero no le pido
nada, con tal de compartir apenas
este universo que hemos conseguido

por las malas y a veces por las buenas.
¿Por qué el mundo soñado no es el mismo
que este mundo de muerte a manos llenas?

Mi pesadilla es siempre el optimismo:
me duermo débil, sueño que soy fuerte,
pero el futuro aguarda. Es un abismo.

No me lo digan cuando me despierte.

Mario Benedetti

sábado, 17 de abril de 2010

POBREZAS

Pobres,
lo que se dice pobres,
son los que no tienen tiempo para perder el tiempo.

Pobres,
lo que se dice pobres,
son los que no tienen silencio ni pueden comprarlo.

Pobres,
lo que se dice pobres,
son los que tienen piernas que se han olvidado de caminar,
como las alas de las gallinas se han olvidado de volar.

Pobres,
lo que se dice pobres,
son los que comen basura y pagan por ella como si fuese comida.

Pobres,
lo que se dice pobres,
son los que tienen el derecho de respirar mierda,
como si fuera aire, sin pagar nada por ella.

Pobres,
lo que se dice pobres
son los que no tienen más libertad de elegir entre uno y otro canal de televisión.

Pobres,
lo que se dice pobres,
son los que viven dramas pasionales con las máquinas.

Pobres,
lo que se dice pobres,
son los que son siempre muchos y están siempre solos.

Pobres,
lo que se dice pobres,
son los que no saben que son pobres.

Eduardo Galeano

jueves, 15 de abril de 2010

La espantosa realidad de las cosas

La espantosa realidad de las cosas
es mi diario descubrimiento.
Cada cosa es lo que es,
y es difícil explicarle a nadie cómo me alegra esto,
y cuánto me basta.

Basta existir para sentirse completo.

He escrito muchos poemas.
He de escribir muchos más, naturalmente.
Cada poema mío lo dice,
y todos mis poemas son distintos,
porque cada cosa es una manera de decir esto mismo.

A veces me pongo a mirar una piedra.
No me pongo a pensar si siente.
No me extravío llamándole hermana mía.
Pero me gusta por ser una piedra,
me gusta porque no siente nada,
me gusta porque no tiene ningún parentesco conmigo.
Otras veces oigo pasar el viento,
y me parece que sólo para oír pasar el viento vale la pena haber nacido.

No sé qué pensarán los demás cuando lean esto;
pero me parece que esto debe estar bien porque lo pienso sin esforzarme,
ni idea de que nadie vaya a oírme pensar;
porque lo pienso sin pensamientos,
porque lo digo como lo dicen mis palabras.

Una vez me llamaron poeta materialista.
Y me extrañó, porque yo no pensaba
que se me pudiese llamar nada.
Yo ni siquiera soy poeta: veo.
Si lo que escribo tiene algún valor, no soy yo quien lo tiene:
el valor está allí, en sus versos.
Todo esto es absolutamente independiente de mi voluntad.

Alberto Caeiro