miércoles, 30 de mayo de 2012

martes, 29 de mayo de 2012

FUNDACION DE UN RECUERDO

No es exactamente como fundar una ciudad
sino más bien como fundar una dinastía.

el recuerdo tiene manos nubes estribillos
calles y labios árboles y pasos
no se planifica con paz ni compás
sino con una sarta de esperanzas y delirios

un recuerdo bien fundado
un recuerdo con cimientos de solo
que con todo su asombro busca el amor
y lo encuentra de a ratos o de a lustros
puede durar un rumbo o por lo menos
volver algunas noches a cavar su dulzura

en realidad no es como fundar una dinastía
sino más bien como fundar un estilo

un recuerdo puede tener mejillas
y canciones y bálsamos
ser una fantasía que de pronto
se vuelve vientre o pueblo
quizá una lluvia verde
tras la ventana compartida
o una plaza de sol
con puños en el aire

un recuerdo sólidamente fundado
fatalmente se acaba si no se lo renueva
es decir es tan frágil que dura para siempre
porque al cumplirse el plazo lo rescatan
los viejos reflectores del insomnio

bueno tampoco es como fundar un estilo
sino más bien como fundar una doctrina
un recuerdo amorosamente fundado
nos limpia los pulmones nos aviva la sangre
nos sacude el otoño nos renueva la piel
y a veces convoca lo mejor que tenemos
el trocito de hazaña que nos toca cumplir

y es claro un recuerdo puede ser un escándalo
que a veces nos recorre como un sol de franqueza
como un alud de savia como un poco de magia
como una palma de todos los días
que de repente se transforma en única

pensándolo mejor
quizá no sea como fundar una doctrina
sino más bien como fundar un sueño.

Mario Benedetti


domingo, 27 de mayo de 2012

Ecopoema

Como su nombre lo indica
el capitalismo está condenado
a la pena capital:
crímenes ecológicos imperdonables
y el socialismo burrocrático
no lo hace nada de peor tampoco

¿Qué le dijo Milton Friedman
a los pobrecitos alacalufes?
-A comprar a comprar
quel mundo se va acabar


Nicanor Parra

viernes, 25 de mayo de 2012

Intelectuales apolíticos

Un día,
los intelectuales
apolíticos
de mi país
serán interrogados
por el hombre
sencillo
de nuestro pueblo.
Se les preguntará
sobre lo que hicieron
cuando
la patria se apagaba
lentamente,
como una hoguera dulce,
pequeña y sola.
No serán interrogados
sobre sus trajes,
ni sobre sus largas
siestas
después de la merienda,
tampoco sobre sus estériles
combates con la nada,
ni sobre su ontológica
manera
de llegar a las monedas.
No se les interrogará
sobre la mitología griega,
ni sobre el asco
que sintieron de sí,
cuando alguien, en su fondo,
se disponía a morir cobardemente.
Nada se les preguntará
sobre sus justificaciones
absurdas,
crecidas a la sombra
de una mentira rotunda.
Ese día vendrán
los hombres sencillos.
Los que nunca cupieron
en los libros y versos
de los intelectuales apolíticos,
pero que llegaban todos los días
a dejarles la leche y el pan,
los huevos y las tortillas,
los que les cosían la ropa,
los que le manejaban los carros,
les cuidaban sus perros y jardines,
y trabajaban para ellos,
y preguntarán,
"¿Qué hicisteis cuando los pobres
sufrían, y se quemaba en ellos,
gravemente, la ternura y la vida?"
Intelectuales apolíticos
de mi dulce país,
no podréis responder nada.
Os devorará un buitre de silencio
las entrañas.
Os roerá el alma
vuestra propia miseria.
Y callaréis,
avergonzados de vosotros.

Otto René Castillo

miércoles, 23 de mayo de 2012

SERÉ CURIOSO


En una exacta
foto del diario
señor ministro
del imposible

vi en pleno gozo
y en plena euforia
y en plena risa
su rostro simple

seré curioso
señor ministro
de qué se ríe
de qué se ríe

de su ventana
se ve la playa
pero se ignoran
los cantegriles

tienen sus hijos
ojos de mando
pero otros tienen
mirada triste

aquí en la calle
suceden cosas
que ni siquiera
pueden decirse

los estudiantes
y los obreros
ponen los puntos
sobre las íes

por eso digo
señor ministro
de qué se ríe
de qué se ríe

usté conoce
mejor que nadie
la ley amarga
de estos países

ustedes duros
con nuestra gente
por qué con otros
son tan serviles

cómo traicionan
el patrimonio
mientras el gringo
nos cobra el triple

cómo traicionan
usté y los otros
los adulones
y los seniles

por eso digo
señor ministro
de qué se ríe
de qué se ríe

aquí en la calle
sus guardias matan
y los que mueren
son gente humilde

y los que quedan
llorando de rabia
seguro piensan
en el desquite

allá en la celda
sus hombres hacen
sufrir al hombre
y eso no sirve

después de todo
usté es el palo
mayor de un barco
que se va a pique

seré curioso
señor ministro
de qué se ríe
de qué se ríe.

Mario Benedetti

lunes, 21 de mayo de 2012

En el exilio

En el exilio...
¡cuántas palabras bastan
para formar un muro transparente
contra el olvido!
¡Cuántas imágenes viviendo en sus mentes
el esplendor de un momento!
¡Cuántas noches de alcohol para no pensar
en los dispersos huesos insepultos!

Y por tu patria y por tus héroes
viste yacer tantos muertos en las calles,
viste las tumbas de tu gente empolvadas,
de aquellos que engendraron en ti un ideal,
aquellos que murieron sin aviso,
sin réplica ni traba;
aquellos que ni la cárcel, ni la muerte, ni el exilio
podrán su voz callar;
aquellos que como tú vivirán en el exilio
y aprenderán a calentarse el corazón tan solo de recuerdos
de una patria que nunca volverán a mirar.



Lina Zerón

sábado, 19 de mayo de 2012

Falta de atención

Ayer me porté mal en el cosmos.
Viví todo el día sin preguntar por nada,
sin sorprenderme de nada.
Realicé acciones cotidianas,
como si fuera lo único que tenía que hacer.
Aspirar, espirar, un paso tras otro, obligaciones,
pero sin pensamientos que fueran más allá
de salir de casa y volver a casa.
El mundo podría ser tenido por un mundo loco
y yo lo tuve para mi propio y trivial uso.
Ningún cómo, ningún por qué,
o de dónde ha salido éste,
o para qué quiere tantos impacientes detalles.
Fui como un clavo superficialmente clavado a la pared,
o
(aquí una comparación que no se me ha ocurrido).
Uno tras otro se fueron sucediendo cambios
incluso en el limitado campo de un abrir y cerrar de ojos.
En la mesa más joven, con una mano un día más joven
había pan de ayer cortado de forma distinta.
Las nubes como nunca y la lluvia como nunca,
porque era con otras gotas que llovía.
La Tierra giraba sobre su eje
pero en un espacio abandonado para siempre.
Duró sus buenas 24 horas.
1.440 minutos de ocasiones.
86.400 segundos que mirar.
El cósmico savoir-vivre
aunque calla sobre nuestro asunto,
exige, sin embargo, algo de nosotros:
una cierta atención, un par de frases de Pascal
y una sorprendente participación en este juego
de reglas desconocidas.

Wislawa Szymborska

jueves, 17 de mayo de 2012

Advertencia

Si alguna vez sufres -y lo harás-
por alguien que te amó y que te abandona,
no le guardes rencor ni le perdones:
deforma su memoria el rencoroso
y en amor el perdón es sólo una palabra
que no se aviene nunca a un sentimiento.
Soporta tu dolor en soledad,
porque el merecimiento aun de la adversidad mayor
está justificado si fuiste
desleal a tu conciencia, no apostando
sólo por el amor que te entregaba
su esplendor inocente, sus intocados mundos.

Así que cuando sufras -y lo harás-
por alguien que te amó, procura siempre
acusarte a ti mismo de su olvido
porque fuiste cobarde o quizá fuiste ingrato.
Y aprende que la vida tiene un precio
que no puedes pagar continuamente.
Y aprende dignidad en tu derrota,
agradeciendo a quien te quiso
el regalo fugaz de su hermosura

martes, 15 de mayo de 2012

Rencor

A veces lo peor no son las cosas
sino lo que estas duran.
Lo peor de las cosas nos ocurre
cuando se nos instalan muy adentro
la ansiedad, la aspereza y el olor a podrido.
Lo peor nos suced
cuando la oscuridad se hace completa.
Cierra la puerta al rencor.
Si logra visitarte se queda para siempre.

Amalia Bautista

domingo, 13 de mayo de 2012

Otra puerta giratoria

Resulta que la vida no era sólo empujar,
ni un juego de engañosos espejismos.
No había que perderse dando vueltas
en una puerta giratoria,
ni desconfiar de todos los reflejos,
ni creer cualquier cosa sólo porque
la imagen parecía verdadera.
Había que encontrar el punto justo
donde azar y destino son lo mismo,
el exacto momento en que la puerta
giratoria te ofrece una salida.

Amalia Bautista

viernes, 11 de mayo de 2012

Anciana en el tercer mundo

Ella salía en las mañanas a buscar el desayuno

de la vida

En su saco de huesos gemía la esperanza

y tristemente con su fardo de arrugas imploraba

en los

(mercados

Toda la ciudad sabía el a b c de su desnutrición

En su falda de muertos reían a lágrimas

remiendos

(bochornosos

y una joroba inmensa al porte de la tierra

se hundía en la espalda de su alma

Pobre paraguas viejo inservible en el invierno

En su enfermo ramaje moría el pájaro cenital de

la

(alegría

En su nido de canas se apagaban los

crepúsculos

y lentamente como vela sombría

se perdía en la muerte

Julio Iraheta

miércoles, 9 de mayo de 2012

Beatus ille

Dichoso aquel
que en otro tiempo
encontraba:
la casa limpia,
la ropa planchada,
la mesa puesta,
los niños durmiendo,
y la mujer
a sus órdenes.

Así dirán,
mañana,
los hombres de hoy
cuando recuerden
estos días
de oficio sin sexo
que por siglos
eludieron,
calificándolos, astutos,
de 'femeninos'.

Y...es muy natural
que así se lamenten
como añoran hoy
quienes evocan
los felices tiempos
de un ayer de esclavos
sin sindicatos ni leyes
y sin derechos humanos.

Tiempos iguales
a los que hoy corren
tras las cerradas puertas
de nuestra intimidad,
como trabajadoras
de doble jornada
sin descanso y sin salario;
desterradas sexuales
de los altos sillones
del poder y la fama.

Luz Méndez de la Vega


lunes, 7 de mayo de 2012

He buscado la libertad

He buscado la Libertad creyéndome pájaro, viento,
agua que fluye,
He buscado la Libertad en las resonancias del espacio
imaginando mi materia desintegrada
en las radiaciones de mi conciencia
en la luz que me baña desde el cosmos.
He buscado mi Libertad en cada nudo del camino
en mis sueños.
He buscado la Libertad viendo crecer a mi hijo
Y destruirme en ella cuando él ya buscaba
su libertad.
He buscado mi Libertad en mis amores,
en las amistades perdidas, en las nuevas,
en la gente de mi sangre.
He buscado la Libertad en mis libros,
amados libros, en sus olores, en sus historias.
He buscado la Libertad en cada gota de lluvia
en la nieve que cae tan lejos de mi niñez.
En el jardín y en el bosque,
en el río ¡ Ah, el río! plateado, el más ancho.
He buscado y seguiré aún cuando caiga
vencida.
Los sentimientos me hacen esclava.

Ana María Manceda

sábado, 5 de mayo de 2012

Disculpa

No me tachéis de inconsecuente porque mi corazón
haya sido apresado por una voz que canta.
Hay que estar serio unas veces y, otras, dejarse emocionar,
como la madera de la que lo mismo sale el arco del guerrero
y el laúd del cantor.

Ibrahim Ben Utman

jueves, 3 de mayo de 2012

ESTA MUJER Y YO

Esta mujer y yo, que sumamos un siglo,
nos unimos en el beso original
bajo un desnudo encino,
sobre un lecho de hierba,
mientras la luz del sol se abre paso entre las ramas
como un ave que se acerca al nido.
Esta mujer y yo,
sobre la arena suave,
a la sombra de una roca sin pecado,
damos un giro a nuestros cuerpos
humedecidos en una sola voluntad.
Aunque en verdad esta mujer y yo
estamos en un lecho conocido,
imaginando, amando,
y en el momento exacto
nuestros cuerpos irradian una luz
que se escurre como el sol entre las hojas
o una gota en la piedra
y el manantial de la vida brota nuevamente
en estos dos cuerpos que reúnen un siglo
pero no han olvidado el origen del mundo.

EDUARDO LANGAGNE

martes, 1 de mayo de 2012

Primer mundo

Aquí, en el “primer mundo”
donde hasta los sordos
escuchan los bocinazos.
Donde los ciegos tropiezan
con vallas y andamios.
Donde los parapléjicos
en jaulas viven obligados.
Donde los ancianos piden limosna
a las puertas del supermercado.
Donde los inmigrantes como bestias
cargan bombonas de butano,
y los parados sólo consiguen contratos basura
y las prostitutas son apaleadas
en la Casa de Campo.

Aquí, donde enviamos caridad
al “tercer mundo”
para que no crucen nuestras fronteras...
Aquí, donde pisoteamos mierda
y los borrachos se orinan en los rincones
y los drogadictos se pinchan
infectándose de cualquier manera.

Aquí, en este país donde vivo
donde no quieren pateras
ni chilenas extranjeras.
Donde invaden la isla Perejil
y sueltan al otro Gil.
Donde todavía existe el Valle de los Caídos
mientras los caminos están llenos de fosas
con los valientes vencidos.

Aquí, donde todo va bien
porque no va para ningún lado.
Ni a la izquierda
ni a la derecha
sólo al centro
para mirarse el ombligo.
Y la tele nos emite
farsas en mil actos
y nosotros andamos furibundos
en éste, el tan mentado
“primer mundo”.


Silvia Cuevas Morales