viernes, 24 de abril de 2020

DEFENSA DE LA TIERRA (Abril de 2020)




Porque nací en una tierra sin tierra, donde las jaras se apoderaban del monte en cuanto el azadón o el pico se quitaban el sudor o refrescaban la garganta.

Porque nací en una tierra donde las semillas germinaban muy lentamente en la solana de diminutos bancales pidiendo a gritos unas gotas de agua para combatir la sed del mediodía.


Porque crecí en una tierra sin tierra, un incendio en verano era la crónica de una tragedia anunciada para el frío invierno de los tenados.


Porque crecí en una tierra sin tierra que al amanecer miraba las nubes del cielo esperando el milagro del pan y los peces, y los días de lluvia recogía el agua de los canalones en los cubos del futuro, comprendí con dolor el desgarro que sienten las riberas cuando el arroyo empieza a secarse, y aprecié enseguida el valor del fruto maduro en las despensas del hambre.


Porque nací y crecí con gente trabajadora, apegada a la tierra y agradecida, me duelen como propias las heridas envenenadas del planeta y la alarmante asfixia de sus cansados pulmones.


Pero, por venir de donde vengo, también sé que quien no se doblega ante la adversidad acaba venciéndola; que quien con paciencia y tesón siembra, recoge; que quien planta un árbol está empezando a hacer crecer un bosque.

Eduardo Alonso

 Recreación en vídeo del texto por José Luis González Pérez el día del libro 23 de abril de 2020. Biblioteca pública de Lora del Río



 

Texto leído por Monserrat Tomás Hernández en Radio Edu, la radio educativa de la Consejería de Educación de la Junta de Extremadura.

Lectura del texto en RadioEdu, radio educativa de la Consejería de Educación de la Junta de Extremadura.


domingo, 19 de abril de 2020

CAMBIO CLIMÁTICO




DICEN QUE YA no llueve cuando toca
                          ni escampa a su debido tiempo.

El río se evapora y emigra para siempre,
                          las nubes guardan gotas frías,
proyectan inundaciones y huracanes.
Crecen agujeros negros
que incuban el centro de la nada.

Dicen que se deshacen los polos y se desbordan los mares,
y bajos sus fondos marinos habitan extrañas criaturas,
gambas gigantes y medusas,
anémonas de mar y arañas acuáticas.

Las hojas ya no saben cuándo dejarse caer
Y los pájaros han comenzado el regreso sin acabar de irse.

Dicen que hará calor.
Donde sembramos manantiales de arena y de ceniza
                          solo nos queda cosechar desiertos.

Amalia Iglesias Serna




viernes, 17 de abril de 2020

miércoles, 15 de abril de 2020

lunes, 13 de abril de 2020

6.


He envidiado a los pájaros,
pero las manos son fuertes,
aman, dan y aceptan.
¡Quiero manos y no quiero alas!

Montserrat Abelló

sábado, 11 de abril de 2020

LO QUE QUEDA DESPUÉS DE LOS VIOLINES





Cuando te olvides de mi nombre,
cuando mi cuerpo sea sólo una sombra
borrándose entre las húmedas paredes de aquel cuarto.
Cuando ya no te llegue el eco de mi voz
ni el resonar cordial de mis palabras,
entonces, te pido que recuerdes que una tarde,
unas horas, fuimos juntos felices y fue hermoso vivir.
Era un domingo en Hampstead, con la frágil primavera
de abril posada sobre los brotes de los castaños.
Pasaban hacia la iglesia apresuradas monjas
irlandesas, niños, endomingados y torpes, de la mano.
Arriba, tras los setos, en la verde penumbra
del parque dos hombres lentamente se besaban.
Tú llegaste, sin que me diera cuenta apareciste y empezamos a hablar
tropezando de risa en las palabras, titubeantes
en el extraño idioma que ni a ti ni a mi pertenecía.
Después te hiciste pequeña entre mis brazos
y la hierba acogió tu oscura cabellera.
A veces las cosas son simples y sencillas
como mirar el mar una tarde en la infancia.
Luego la escalera gris, larga y estrecha,
la alfombra con ceniza y con grasa,
tus pequeños pechos desolados en mi boca.
Sí, a veces es sencillo y es hermoso vivir,
quiero que lo recuerdes, que no olvides
el pasar de aquellas horas, su esperanzado resplandor.
Yo también, lejos de ti, cuando perdida en la memoria
esté la sed de tu sonrisa me acordaré, igual que ahora,
mientras escribo estas palabras para todos aquellos
que un momento, sin promesas ni dádivas, limpiamente se entregan.
Desconociendo razas o razones se funden
en un único cuerpo más dichoso
y luego, calmado ya el instinto
y rezumante de estrenada ternura el corazón,
se separan y cumplen su destino,
sabiendo que quizá sólo por eso
su existir no fue en vano.

JUAN LUIS PANERO

jueves, 9 de abril de 2020

Sola no estás



No es cuestión de palabras,
es un rumor de fondo
queriendo aparecer.
Se entrecruzan las voces
como peces revueltos
dentro del pecho. Duelen,
hacen daño.

Fuera cantan los pájaros
y tú cierras los ojos.
Engaña la quietud del momento.
Pero a ti no te ciega
esta postal de vida retirada.
Sola no estás, el pensamiento
no deja de latir, da golpes, bulle,
igual que si la tierra se moviera.

Tú eres la tierra que se mueve,
que tiembla con el fuego de otra música.
No estás sola.
El río de la historia sobreviene.
un murmullo se acerca.

Has de saber qué dicen esas voces
que ya no se conforman,
mujeres que callaron tanto tiempo,
razones que traen luz:
para nunca estar solas.

Ángeles Mora


martes, 7 de abril de 2020

HAY una natural hermandad


HAY una
natural hermandad entre nosotros
y la tierra, el viento, la luz
que los ojos recogen,
cada vez un poco más cansados.
_____________Tienen
el mismo sabor nuestro, la misma respiración
íntima, y no es un delirio de la santidad
el llamarlos hermanos, sino tan sólo el reconocimiento
de un vínculo natural, limpio. 
________________ Y cuando
esto se comprende, también debe ser fácil entender
que ese vínculo llega hasta el final, que incluso
el dolor, la muerte, la propia nada, son
de la misma materia que nosotros.

JOSÉ CEREIJO


domingo, 5 de abril de 2020

Ítaca

Cuando salgas hacia Ítaca
ruega por que el camino sea largo,
lleno de peripecias y descubrimientos.
A lestrigones y a cíclopes,
o al iracundo Poseidón no temas.
No encontrarás tal cosa en tu camino
si alto es tu pensamiento, y refinada
la emoción que toque tu espíritu y tu cuerpo.
A lestrigones y a cíclopes
o al fiero Poseidón no habrás de hallarlos
a no ser que los lleves en tu corazón,
mientras tu corazón no los ponga frente a ti.
Ruega por que el camino sea largo.
Que muchas sean las mañanas de verano
cuando arribes –¡con qué placer y alegría!–
a puertos nunca vistos.
Detente en los mercados de Fenicia
y compra allí lindos artículos,
madreperla y coral, ámbar y ébano,
y toda clase de perfumes sensuales,
tantos perfumes sensuales como puedas;
acude a muchas ciudades egipcias
para aprender y aprender de los versados.
Ten siempre a Ítaca en la mente.
Llegar allí es tu destino.
Pero en ningún modo apresures el viaje.
Mejor dejar que dure muchos años,
para que llegues, viejo ya, a la isla,
rico con todo lo que has ganado en el camino,
sin esperar que Ítaca te dé riquezas.
Ítaca te dio un hermoso viaje,
si no es por ella no habrías emprendido el camino,
pero no te dará más.
Y si la encuentras pobre, Ítaca no se ha burlado.
Así de sabio como te volviste, con tanta experiencia,
entenderás entonces qué querían decir las Ítacas.

viernes, 3 de abril de 2020

Camino al revés


De vez en cuando
camino al revés:
es mi modo de recordar.

Si caminara sólo hacia delante,
te podría contar
cómo es el olvido.



Humberto Ak'abal

miércoles, 1 de abril de 2020

Es cierto


Es cierto que este mundo en que nos falta el aire
Sólo inspira en nosotros un asco manifiesto,
Un deseo de huir sin esperar ya nada,
Y no leemos más los títulos del diario.
Queremos regresar a la antigua morada
Donde el ala de un ángel cubría a nuestros padres,
Queremos recobrar esa moral extraña
Que hasta el postrer instante santifica la vida.
Queremos algo como una fidelidad,
Como una imbricación de dulces dependencias,
Algo que sobrepase la vida y la contenga;
No podemos vivir ya sin la eternidad.
Michel Houellebecq