Ni las pilas
ni los chicles
ni las bolsas de
supermercados.
El mayor problema de
contaminación actual
es la cosificación
de la humanidad.
Con los envases no
alcanzaba
y con los pañuelos
tampoco.
La tendencia marca
ahora
tratar a los seres
humanos
de manera
descartable.
Lo mismo que con el
diario de ayer,
se deja a las
personas olvidadas
en un banco de plaza
o en el andén de la
estación.
Algunos que todavía
creemos
en el significado de
la palabra incondicional
iniciamos un
movimiento
para frenar
el desprendimiento
indiscriminado de personas.
Se trata seriamente
de entender
que para muchos de
nosotros
las relaciones no
son biodegradables.
Verónica Peñaloza
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